Los relatos acerca del narcotráfico y sus figuras principales han pasado por la romantización exacerbada hasta un retrato más realista que ofrece los altos y bajos de nombres como Pablo Escobar o Miguel Ángel Félix Gallardo en programas como Narcos y Narcos: México de Netflix, quien ahora retoma esas historias con Griselda. En Crónica Escenario charlamos con Sofía Vergara, protagonista y productora ejecutiva del show, acompañada de Eric Newman, también productor ejecutivo y creador de la serie así como el director Andrés Baiz, quienes nos ofrecieron pormenores acerca de esta miniseries que retoma el infame ascenso y caída de “La Madrina”, Griselda Blanco.
“Lo primero que me interesó de ella y del proyecto era que jamás había oído hablar de Griselda y eso que crecí en Colombia durante esa época en la que el tráfico de drogas tuvo su gran boom y cada nombre y apellido del cartel era temido. Sabíamos lo que hacían, que eran buscados y el hecho de que existiera una mujer que fuera capaz de estar al nivel de ellos sin saber realmente mucho de quién era, fue lo que me convenció de hacer esta serie”, comentó Vergara sobre sus motivaciones para darle vida a Blanco.
“Para mí, era alguien con quien nos topamos en nuestra investigación para la serie de Narcos, estaba afiliada al cartel de Medellín y cruzó su camino con Escobar y los hermanos Ochoa pero de la que no se sabía mucho. Lo que averiguamos de ella nos dio para entender que era un personaje convincente pues es la primera y única mujer que sabemos llegó a ese nivel de prominencia en el mundo de los narcóticos y no la incluimos en la serie. Pero fue cuando Sofía nos mostró su interés para la cuarta temporada que resultó irresistible pensarlo”, añadió Newman.
Pero hablar de este tipo de personajes no siempre es tan sencillo. “Griselda no era como los otros traficantes, ella no buscaba crédito ni quería estar siempre al frente o volverse famoso pues ella estaba consciente de que hacerlo sería algo malo, especialmente porque ella estaba en Miami. Supo mantenerse bajo el radar, algo que no fue sencillo. Existen muchas anécdotas que incluso se sienten deshonestas debido a lo absurdo que suenan aunque algunas resultaron ser verdad a pesar de ello. Además, Doug Miro y yo usamos la investigación de June Hawkins, la oficial que persiguió a Griselda, además de artículos y declaraciones de abogados que Sofía compiló para poder entenderla mejor, pudimos construir una narrativa atractiva acerca de su ascenso y caída”, expresó el productor ejecutivo.
Vergara llevaba tiempo intrigada por la personalidad de Griselda Blanco, algo que le funcionó para interpretarla. “Pude relacionarme con ella fácilmente como mujer colombiana, como la madre soltera que fui e incluso como inmigrante. Simplemente el ser mujer me hizo pensar que podría darle vida. Mi hermano fue parte del negocio del narco, lamentablemente, y fue asesinado en Colombia. Estaba familiarizada con el sentimiento y sabía el costo de este negocio, así como la horrible forma en que se destruyen las familias. Es algo que se esparce y, como actriz, pensé en lo que haría una madre que enfrentase estas situaciones. Aquí, no son los hombres queriendo tener poder y dinero, es una madre con cuatro hijos pero ¿porqué alguien así se metería a ese negocio?”, mencionó.
“También recibí mucha ayuda por parte de Andy, con quien tuve varias juntas y pudimos leer el guion antes de comenzar a grabar. Esa colaboración fortaleció todo y me quitó las dudas de ciertos aspectos de los que no estaba segura. Quería asegurarme de que entendía su forma de ver esta historia así que creamos un vincula que nos ayudó a obtener lo que ambos buscábamos en el set”, agregó Sofía.
Aunque claramente Griselda no es un ejemplo a seguir, para los creativos del show era importante desmitificarla y darle una profundidad interesante. “Cuando comenzamos este proceso, ella era una bestia, un monstruo demoníaco pero, en mi experiencia, uno entiende que jamás sucede así. Si bien una persona es capaz de hacer actos monstruosos, no necesariamente se convierten en ello. Claro que Griselda hizo muchas cosas horribles, pero también inspiró un tremendo amor, lealtad y respeto. Creo que mucha de la narrativa creada a su alrededor fue de hombres que trataron de justificar a una mujer a la que realmente le temían pero que realmente nunca tuvo su propia voz”, declaró Newman.
“Ella pudo volverse tan brutal como ellos a pesar de ser madre y tener a sus hijos. Para muchos, alguien así es incapaz de alcanzar esos grados de odio y horror sino que usualmente le gana el lado protector de supervivencia y ayuda pero que con todo lo que encaró y vivió, el odio se tornó cada vez peor en su mente y alma, la llevó a perder sus valores y todas las buenas intenciones que pudo tener al principio”, complementó Vergara.
Para interpretar a Blanco, Vergara tuvo que atravesar por diversas transformaciones. Al respecto, Andrés Baiz, director del proyecto, explicó: “Ella pasó no solamente por la física ni en la cuestión de buscar a base de prueba y error el look que buscábamos tuviera. Usó todo el tiempo prostéticos en la filmación, de nariz, peluca, dientes, que le permitieron alejarse de su propia persona y del personaje que le conocíamos en Modern Family. Pero como director, le di mayor importancia al cambio interior en términos de cómo caminaba, bailaba y en lo que creía. Es esa franqueza la que ella pudo transmitir en la serie y de la cual estoy muy orgulloso del proceso. Siempre buscamos que el maquillaje no fuera el centro de la actuación”.
“Siempre busqué verme real y no quería que la gente pensara que el hecho de usar una nariz falsa pudiera hacer creer a la gente que soy una actriz dramática. Sé que el papel, para alguien con mi acento, era ideal. Además, es divertido encontrar siempre algo que puedes crear desde cero. De verdad, siempre creí que podría ser Griselda. Aunque me tomó unos 15 años poder finalmente hacer la serie, nunca pensé en este rol como algo para reinventar mi carrera y probar que puedo realizar roles de este tipo. Simplemente fue que me vi como la ideal para hacerlo”, agregó Vergara.
“A veces, esos proyectos que resultan desafiantes o que pueden hacerte sentir incómodo son los que valen la pena tomar. Como director, puedo decir que sí existió un reto para Sofía e incluso para todos los involucrados. Admiro la valentía con la que dio el salto al frente, donde salió de cierta zona de confort que nos ha brindado la oportunidad de materializar un proyecto como éste”, dijo Baiz, aplaudiendo la determinación y compromiso de su protagonista.
Baiz y Newman llevan siete años colaborando juntos, estableciendo un lazo importante entre ambos para crear historias. “Eric es una especie de mentor para mí, es uno de mis mejores amigos. Colaboramos y podemos leernos las mentes. Creo que trabajar en Narcos con él me hizo un mejor director pues me ha dado la oportunidad de trabajar con algunos de los mejores actores latinos y americanos que existen, sumado a grandes guiones. He aprendido de mis errores y el poder trabajar en un set bilingüe me dio la experiencia que necesitaba para Griselda, una serie que se enfoca en un solo personaje y se maneja muy diferente a Narcos”, manifestó el realizador.
“Me encanta hacer televisión y tener el lujo de trabajar con Andy anteriormente en seis temporadas ha sido un placer. He aprendido muchas cosas en ese proceso y ahora puedo afirmar que no siento que Griselda sea un primo cercano de Narcos. Me parece que esta serie necesitaba su propia esencia debido a la actuación de Sofía. Eso lo aprendí en la primera temporada de ese proyecto, y fue así que ahora pudimos crear algo más íntimo que se alejara de la mirada sociopolítica y la futilidad de la guerra contra las drogas para enfocarnos en el relato de esta persona, donde si bien tomamos algunas de las formas narrativas experimentadas en Narcos, eso solamente fue como ir a la escuela para poder crear de manera efectiva a Griselda”, declaró Newman.
Finalmente, los involucrados en el proyecto expresaron el porqué Griselda es un relato diferente a los que se han hecho de este personaje anteriormente. “Esta no es una serie que simplemente acumule las más destacadas anécdotas de su vida, sino que trata de un empoderamiento que vemos en Griselda pero también en June y cómo ambas tiene que luchar por lo que quieren y trabajar diez veces más duro que todos para ser respetadas y escuchadas para después encontrar cómo ese viaje resuena en el mundo actual. Eso era lo más importante que queríamos lograr”, mencionó el director.
“Ver que una mujer es capaz de escalar a la cima de su negocio en un ambiente machista fue muy interesante. Creo que es una parte de ella que llegué a admirar y eso me molestaba un poco. Ese impulso que tuvo por tanto tiempo, detrás de esa apariencia de una pequeña dama que no era atemorizante ni nada pero que logró hacer un montón de dinero y salirse con la suya. No es que quiera hacer algo similar, pero creo que si Griselda no hubiera tomado las decisiones equivocadas y ese impulso fuese enfocado hacia lo positivo, podría haber logrado cosas como ser la presidenta de Colombia”, afirmó Vergara.
“Es importante para mí que la gente vea esta historia no solamente como un relato del narcotráfico más, sino mostrar a Griselda como un personaje, algo que jamás habíamos visto. No se trata de balaceras y matanzas o de mandar cocaína por todos lados, sino del interior de esta mujer y el viaje interno que la convirtió en lo que fue”, concluyó la actriz colombiana.
Copyright © 2024 La Crónica de Hoy .