Mundo

Al menos 36 muertos por las lluvias torrenciales en Madagascar

El número de muertos por las fuertes lluvias torrenciales que sacudieron durante la última semana a Madagascar, se agravaron tras el paso de la primera tormenta tropical este fin de semana 

cambio climático

Foto: Cortesía

Foto: Cortesía

Desde el pasado día 17 de enero, fuertes lluvias y tormentas eléctricas han estado sacudiendo el norte de Madagascar y su capital provocando inundaciones y deslizamientos de tierra.

Las fuertes precipitaciones causadas por el paso de la tormenta tropical de la temporada, que tocó tierra en la costa oriental del país la noche del sábado al domingo afectaron sobre todo a la capital, Antananarivo (centro), donde provocaron el desplazamiento de más de 32.000 personas, según la Oficina de Riesgos y Desastres (BNGRC).

Entre las víctimas, 28 personas murieron en la capital -tras el hallazgo de cinco cuerpos más esta madrugada por los bomberos-, una perdió la vida en la ciudad de Fianarantsoa (centro-sur) y siete fallecieron en Moramanga (este).

Sin embargo, varias de estas personas que se vieron obligadas a abandonar sus casas y están ahora repartidas en cerca de 60 localizaciones de la capital -incluyendo edificios públicos y refugios provisionales- aseguraron hoy a Efe de que se encuentran en condiciones de hacinamiento y poco higiénicas.

"Dejamos nuestras casas por el agua estancada para vivir con un montón de lodo", aseguró a Efe una joven madre mientras sostenía a su bebé en una de las tiendas instaladas para los afectados.

Foto: Cortesía

Foto: Cortesía

Este escenario contrasta con la prolongada sequía que asola el sur de Madagascar desde hace un año -la más severa de los últimos cuarenta años-, donde más de 1,1 millones de personas no pueden comer lo que necesitan debido a la ausencia de lluvias.

A finales de 2021, la ONU advirtió de que el sur del país africano estaba acercándose a la primera "hambruna provocada por la crisis climática".

Antananarivo sufrió importantes daños en sus infraestructuras a causa de las lluvias, que provocaron el derrumbe de varios inmuebles en la capital malgache, así como el corte de carreteras y la inundación de campos de cultivo de arroz y varios edificios públicos, como el del Ministerio de Asuntos Exteriores y un centro destinado al tratamiento de la covid-19, informó la semana pasada la BNGRC.

Tras abandonar Madagascar, la tormenta tropical, que se ha convertido en ciclón y ha sido bautizado como Ana, avanza en dirección occidental hacia Mozambique.

Según las previsiones meteorológicas recogidas por la Red de Sistemas de Alerta Temprana de Hambrunas, las precipitaciones se mantendrán por debajo de la media en el suroeste de Madagascar hasta por lo menos el próximo mes de marzo.

Foto: Cortesía

Foto: Cortesía