El titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard Casaubon reprobó que Estados Unidos no está haciendo un esfuerzo para frenar el tráfico ilegal de armas a México que sea proporcional al que le pide al gobierno mexicano para controlar la introducción a su territorio de fentanilo y precursores químicos.

Sostuvo, que mientras no se logre reducir el flujo de armas ilegales hacia nuestro país, no se podrá reducir la violencia que estamos viviendo, “sería casi impensable”, dijo, poder lograrlo, al tiempo que reiteró que “lo esencial para México es el control del tráfico de armas hacia nuestro país. No se puede reducir la violencia, con el volumen que tenemos actual de tráfico de armas”.

Asimismo, refirió que los tres municipios mexicanos con más armas decomisadas son Tijuana, con 3,201 piezas; Ciudad Juárez, con 2,179, y Guadalajara, con 1,217, seguidos de Querétaro y León con 1,186, cada uno, y Reynosa con 865, en contraste con entidades como Yucatán, en donde se han encontrado muy pocas armas, así como Oaxaca, con excepción de una parte del Istmo, así como las serranías del norte, con lo que, “el resto del país tiene una pandemia de armas con diferentes grados de intensidad”.

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Esto, dijo, son las armas aseguradas en el periodo referido, que es un periodo de tiempo muy corto, pero se puede deducir que el número es mucho mayor “y si nosotros no reducimos esa disponibilidad, va a estar muy difícil lograrlo”, insistió.

Ebrard Casaubon refirió que, los tres municipios mexicanos con más armas decomisadas son Tijuana, con 3,201 piezas; Ciudad Juárez, con 2,179, y Guadalajara, con 1,217, seguidos de Querétaro y León con 1,186, cada uno, y Reynosa con 865, en contraste con entidades como Yucatán, en donde se han encontrado muy pocas armas, así como Oaxaca, con excepción de una parte del Istmo, así como las serranías del norte, el resto del país tiene una pandemia de armas con diferentes grados de intensidad.

Esto, dijo, son las armas aseguradas en el periodo referido, que es un periodo de tiempo muy corto, pero se puede deducir que el número es mucho mayor “y si nosotros no reducimos esa disponibilidad, va a estar muy difícil lograrlo”, insistió.

Para frenar ese flujo, abundó, México, en buena medida lo está haciendo, pero, “pensamos que Estados Unidos en lo que va del siglo, no ha habido acciones importantes en esta materia, porque se tomaba el argumento de que el Congreso no quería modificar la ley, que no se puede restringir a los ciudadanos, la primera y segunda enmienda, en fin”.

"A ellos (Estados Unidos), les preocupa esencialmente los precursores químicos que pasan por nuestro país y/o fabricación de fentanilo. A nosotros también nos preocupa por supuesto, y a México lo que le preocupa es que haya un esfuerzo coincidente proporcional para reducir este flujo, porque es lo que arma a todos los grupos delincuenciales en México, y provoca una violencia importante.

“En nuestro país -abundó el canciller-, yo les diría: si no reducimos este flujo es casi impensable reducir las tasas de violencia que tenemos, o nos va a tomar mucho tiempo, esto no quiere decir que sea un sólo factor pero si es determinante por eso le hemos dado ese nivel de importancia”.

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EFE

Así lo manifestó durante su intervención en el marco de la inauguración de la Conferencia Internacional "El negocio de la letalidad: el tráfico de armas a México", en donde, el encargado de la política exterior del país, estableció que mientras que de 2020 a la fecha en nuestro país se han incautado 55,996 armas introducidas ilegalmente desde Estados Unidos, -, aunque el número de armas ilegales disponibles en el país, es mucho mayor, aunque no precisó la cifra-, en tanto que en el mismo periodo el gobierno estadunidense solo ha decomisado 355 piezas de armamento que los traficantes pretendían pasar por la frontera.

En el evento organizado por El Colegio de México, Ebrard Casaubon, puntualizó, que para el gobierno de México es prioritario frenar el tráfico de armas de origen estadunidense, pues sin ello no se podrá reducir de manera sostenida la violencia en el país.

Indicó que hay acuerdos de cooperación en materia de seguridad entre los gobiernos de Andrés Manuel López Obrador y Joe Biden, incluso, abundó, México ha ofrecido pagar la instalación de arcos detectores para que las autoridades estadunidenses refuercen sus medidas para controlar el tráfico de armas hacia territorio mexicano.

“México padece una pandemia de armas con diferentes grados de intensidad”, ya que en los últimos tres años se han detectado y asegurado en todos los estados del país armas introducidas de manera ilegal desde Estados Unidos.

Los condados estadunidenses que venden la mayor cantidad de armas incautadas en México, por mencionar algunos son Arizona, Texas, así como quienes venden estas armas, que ya están identificados, con lo que, dijo, el esfuerzo que tiene que hacer Estados Unidos para frenar drásticamente el flujo a México, es muy pequeño respecto al esfuerzo de nuestro país para controlar los precursores químicos y las drogas que llegan a Estados Unidos, entonces, dijo, “hay una desproporción de esfuerzos.