Opinión

“Done is better tan perfect” El Universo del Metaverso

Cualquiera que hubiera conocido en su juventud temprana a ese muchacho daltónico y un tanto peculiar, jamás lo hubiera imaginado como uno de los hombres más ricos del mundo. Aquella idea, concebida junto con otros compañeros de la universidad, para elaborar un directorio de alumnos, resultó el embrión de una empresa y varias plataformas que involucran a miles de millones de personas en la actualidad.

Archivo

Archivo

Fiel a esa actitud visionaria y emprendedora, ahora que quizás muchas personas imaginaban su declive por problemas de imagen o relacionados con la falta de ética en los negocios, Mark Zuckerberg nos sorprende con su proyecto relacionado con el “metaverso”, concepto aparecido por vez primera en 1992 en la novela “Snow Crash” de Neal Stephenson, referido a un mundo enteramente digital, existente paralelamente a nuestra realidad actual.

Zuckerberg anunció a finales de octubre de que Facebook cambiaría el nombre de su marca a Meta. Esto se basa en la gran apuesta para el futuro de la compañía para desarrollar un metaverso. Éste será un espacio virtual en el que los individuos puedan no sólo compartir momentos sociales, sino trabajar, comprar, estudiar y acceder al entretenimiento. Para ello, unas gafas de realidad virtual podrán utilizarse para conectarse a estos servicios. El cambio a Meta como la marca central de Zuckerberg ya puede presenciarse en todos nuestros dispositivos al usar los tres servicios existentes de Facebook, WhatsApp e Instagram y plantea ser el centro del modelo de negocios de Zuckerberg para los siguientes 10 años.

La compañía Facebook ha sufrido una serie de problemas alrededor de su modelo de negocios. Uno de ellos fue la relación entre su algoritmo que favorece las comunidades cerradas y los sitios de noticias falsas que llevó a Zuckerberg a comparecer ante el Congreso estadounidense. También la concentración de mayor poder de mercado al comprar WhatsApp e Instagram. Posteriormente, en 2020, Facebook cambió sus términos de servicio en relación con los datos personales, creando una crisis de confianza en los consumidores. Asimismo, la llegada de la generación Z cambió las preferencias de los usuarios más jóvenes por otras redes como Tiktok y otros formatos de comunicación.

Esta nueva apuesta hacia la realidad aumentada y la realidad virtual plantea que la siguiente generación de redes sociales exploren los conceptos de “presencia” y “espacio común” con experiencias inmersivas. Zuckerberg tendrá que invertir centenares de miles de millones de dólares en los próximos diez años, una cifra que podría alcanzar los 800 mil millones de dólares para 2024, según Bloomberg. Meta busca ser un espacio donde los usuarios puedan interactuar con las diferentes capas de realidad virtual en las que ya operan en el día a día, pero de forma desagregada. Las capas de realidad virtual que ya usamos en el teléfono, en el trabajo y en los medios.

Varias empresas han declarado su interés en invertir en el metaverso. Disney plantea expandir su negocio de entretenimiento en estas plataformas, así como varias empresas desarrolladoras de videojuegos. Otras compañías de tecnología de vídeo como Nvidia o Play Station, están trabajando en la siguiente generación de gafas de realidad virtual, que es el mayor reto técnico para la adopción del metaverso. En China, diversas empresas han comenzado inversiones para el metaverso, principalmente los gigantes Tencent y Alibaba, que de forma incipiente plantean un asistente tridimensional para sus servicios.

Una de las primeras aproximaciones al metaverso es el campus virtual “Accenture Nth Floor” creado en 2019 por Microsoft, AltspaceVR y Accenture que permite a las personas reunirse, interactuar y colaborar en oficinas virtuales en el metaverso. Con un set de gafas virtuales, es posible visitar las múltiples salas de este piso virtual. Incluso antes de la pandemia se utilizó para reuniones virtuales, townhall inmersivos, cumbres, conferencias, eventos de reclutamiento y eventos sociales evitando los altos costos y emisiones de carbono relacionados con eventos globales.

Pew Research Center en su monitoreo constante de las redes sociales describe cómo entre 2019 y 2021 las redes con crecimiento más rápido fueron TikTok, Reddit y Youtube. Facebook no ha tenido un crecimiento significativo en los pasados 5 años, los nuevos usuarios en las plataformas de Meta provienen de Instagram. Facebook tiene menos usuarios entre los menores de 30 años. Ante las nuevas plataformas, el Facebook tradicional no puede editar videos con música y avatares como en TikTok, compartir discusiones sobre finanzas como las que presenciamos en Reddit durante el evento de Gamestop, o producir contenido de vídeo donde los creadores reciban pagos como en Youtube.

Pero para entender el nuevo papel del metaverso es necesario pensar fuera de las redes sociales tradicionales. Uno de los juegos que ha explorado esta realidad virtual es Fortnite. Los miembros de la generación Z han dejado en un papel secundario el uso de “juego” de esta plataforma y la han utilizado para interactuar socialmente. Los usuarios pueden utilizar diferentes objetos virtuales, construir artefactos e incluso ver videos y compartir imágenes en grupo. De igual manera, otros juegos como Minecraft han tenido este efecto, por su versatilidad para comprar, construir e interactuar.

Las redes sociales tradicionales como Facebook se han quedado al margen de estos cambios. Si bien la década de 2010 a 2020 fue sin duda dominada por Facebook, los siguientes 10 años están trayendo cambios que la compañía deberá adoptar. Zuckerberg ha explorado otros proyectos con un éxito ambiguo; como Libra, su proyecto de criptodivisa, o la compra de WhatsApp que ha sido difícil de monetizar. Algunas críticas a Meta giran alrededor de lo ambicioso de su planteamiento. Hasta ahora sólo hemos visto el vídeo de la presentación. La presentación de Meta aún es un producto en desarrollo, pero busca integrar la capacidad de interactuar con base en avatares como los de estos juegos.

Pero Meta tiene el reto tecnológico de popularizar las gafas de realidad virtual como un dispositivo tan útil y expandido como el teléfono inteligente. Estos dispositivos, antes de la escasez de chips, estaban reduciendo su precio y complejidad. Sin embargo, diversos factores han limitado su expansión en el corto plazo: la guerra comercial entre Estados Unidos y China, la escasez de chips y las barreras regulatorias que los gigantes tecnológicos pueden enfrentar.

Viene a cuento, sin embargo, recuperar la frase que se dice que aparece en alguna parte de la sede de Facebook y que he utilizado para el nombre de esta colaboración “Done is better, than perfect”, (Mejor, hecho, que perfecto) como un principio de negocios que nos permite aventurar que, con las limitaciones que sean, pronto veremos ese metaverso, aunque sea imperfecto. Baste pensar en que ya existen algunos fundamentos importantes para soportar su existencia, como las cuantiosas inversiones que diversas compañías han hecho en generar grandes espacios de procesamiento en la nube. Ya lo veremos.