Opinión

Del peligro de las licencias “patito”

Una licencia de conducir, sin elementos de seguridad suficientes para acreditar la identidad del portador, es parte del arsenal de la delincuencia organizada.

Licencia de conducir

Licencia de conducir

Los ahorros en la elaboración de la licencia suelen salir, a la larga, carísimos. No solo se avala la destreza de un individuo para manejar un automóvil, eso se sabe, también es un documento que se usa en todo tipo de trámites. Una licencia patito suele usarse para ocultar o fabricar identidades de personas que operan en las sombras, al margen de la ley. Detrás de una licencia elaborada sin rigor técnico hay un potencial delincuente enmascarado.

Lee también

Desarticulan red de falsificadores de licencias gracias a candados de seguridad

Daniel Blancas Madrigal
Municipio de Tamazula de Gordiano, en Jalisco

En inmensa la lista de delitos que se pueden cometer con una identidad falsa, en un entorno de debilidad institucional como el que vive el país, un primer paso para recomponer el camino sería, sin duda, asegurar que el portar de una licencia de conducir sea realmente la persona que la muestra en una ventanilla, en un retén, en la caja de un comercio. No se puede tomar a la ligera su elaboración. Hacerlo es un juego peligroso.

A lo largo de la semana que termina, Crónica ha publicado sólidas piezas periodísticas en las que se muestran los grandes riesgos que encierra el malentendido de facilitar el acceso a las licencias, despojándolas de sus elementos de seguridad. Se puede conseguir en tiempo récord una licencia de conducir con una identidad que nunca se verificó.

Sobre el caso particular de Guerrero, Arturo Ramos escribió en estas páginas que en redes sociales se ofrecen, en oferta, las licencias de conducir que emiten los municipios guerrerenses y que, en un mal engranaje de las atribuciones federales, son válidas en todo el territorio nacional. Se emite sin mayor verificación de los datos del solicitante, tramitada por wasap en unas horas, y con registro al sistema electrónico de licencias, lo que puede constituirse en una primera “oficialización” de una identidad personal falsa. A partir de allí, al cabo de un tiempo, puede tramitarse una credencial para votar y posteriormente un pasaporte.

Lee también

Guerrero, licencia por WhatsApp y carnaval de identidades hechizas

Arturo ramos ortíz
Especial

Los municipios guerrerenses, administrativamente débiles, emiten estos permisos de conducir en micas que intentar imitar a las de otros estados, pero que no cuentan con ningún candado de seguridad. “La licencia te sirve en todo el país, si alguien quiere verificar su validez legal, el municipio tiene un sistema de consulta en web en el que se respalda la legalidad del documento. Usted paga hasta que vea allí su licencia”. Guerrero es una de las zonas con mayor problemática de narcotráfico, ajeno muchas veces a escándalos o matanzas que alcanzan las cadenas nacionales de TV, pero repentinamente, cuando el Ejército o –ahora- la Guardia Nacional entra a ciertos municipios, tropeles de “pobladores” salen enseguida a cerrarles el paso. De igual forma, la movilidad en esos lugares incluye los retenes “civiles” bajo tolerancia de la autoridad municipal.

Se debe y se puede dar certeza al documento. Hay entidades de la república que lo han conseguido gracias a que privilegiaron la seguridad y el profesionalismo Así ha ocurrido en distintos estados del país, uno de ellos Jalisco, donde el documento es expedido desde hace varios años bajo diversas medidas de protección y elementos tecnológicos imposibles de falsear. Lo anterior, según revela el reportero Daniel Blancas, ha derivado en el desmantelamiento de bandas con sofisticados modos de operación, como el uso de códigos QR adulterados, páginas web hechizas e incluso usurpación de funciones e identidad. En suma, una licencia de conducir patito es un peligro social.

Lee también