Los jóvenes artistas de ópera Génesis Moreno y Daniel Cruz, integrantes de EOBA reanudan actividades tras la pandemia.

Año tras año con el propósito del desarrollo profesional de artistas escénicos, el Programa de Residencias Artísticas en Grupos Estables del INBAL (PRAGEI), operado por el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura ofrece su incorporación como residentes al Estudio de la Ópera de Bellas Artes (EOBA).

El estudio de Ópera de Bellas Artes, implementada en 2014 por Ramón Vargas, tenor mexicano, busca estimular y adquirir perfeccionamiento operístico de jóvenes cantantes y pianistas preparadores a través de una formación integral desarrollada por talleres, clases magistrales, participaciones en montajes operísticos entre otras actividades.

Los seleccionados se desenvuelven como parte del programa en talleres de actuación, movimiento escénico y corporal, historia de ópera, técnica Alexander, entre otras, impartidas por destacados maestros.

Hay muchas cosas importantes, una de ellas es tener una técnica de canto adecuada, se dice fácil pero no lo es. Cantar implica una parte emocional, una parte espiritual; la tierra y el cielo y tiene que ser una combinación de ambas, no puede ser solamente terrestre y vivir de las pasiones, tampoco puede ser etérea y vivir solamente del cielo, se necesita una combinación y el enlace entre dos vertientes es una técnica vocal adecuada que permita que tu voz, tus emociones fluyan y tu canto sea un canto correcto, elegante, educado y al mismo tiempo emocional. Dice Ramón Vargas.

Génesis Moreno tiene 27 años, fue una de las cantantes elegidas para la generación 2022 del EOBA. La joven soprano de nacionalidad venezolana inició sus estudios musicales a los 10 años en el Sistema de Orquesta y Coros Juveniles e Infantes en su país de origen, cuando tenía 16, entró al Conservatorio Simón Bolívar, donde egresó como soprano.

Hace 4 años, su madre inmigro a México y Génesis lo vio como una oportunidad para seguirse desarrollando como cantante.

“Yo lo vi como una nueva oportunidad de seguirme desarrollando en un país nuevo, más grande, con nuevos retos y con cosas nuevas que enseñarme que han enriquecido mi formación y seguramente seguirán haciéndolo” comparte Genesis Moreno.

La soprano formó parte del Coro Juvenil San Agustín, fue solista en diferentes festivales de música sacra con la Orquesta Gran Mariscal e integró la Coral Nacional Juvenil Simón Bolívar.

Estando en México, destacó rápidamente, en el 2020 realizó un recital como solista acompañada al piano por Daniel Cruz en una de las noches de gala del importante festival Alonso Ortiz Tirado (FOAT), participó en sinfónicos corales como la 9na de Beethoven, 2da de Malher y Carmina Burana.

El talento y entrega de la cantante la ha llevado a ganar importantes premios, participó por dos años consecutivos el Concurso Internacional de Canto Linus Lerner, en 2020, quedando el segundo lugar y en 2021 llevándose el primer lugar.

A poco más de dos años de pandemia, la nueva generación del Estudio de la Ópera de Bellas Artes retoma sus presentaciones públicas puesto que por medidas sanitarias se suspendieron y tuvieron que presentarlos de manera virtual a excepción de un recital en diciembre del año pasado.

Al día de hoy, los residentes hacen intervenciones en los pasillos del Museo del Palacio de Bellas Artes mostrando su talento y pasión a través de la música. La próxima intervención será el próximo sábado 14 de mayo a las 13:00 y 14:00 hrs.

Así mismo, tendrán dos fechas donde presentarán el concierto “Celebrando los 230 años del nacimiento de Rossini”. El sábado 21 de mayo, será en el Teatro Ocampo en Cuernavaca, Morelos a las 19:00 hrs y el 25 de mayo en la Sala Manuel M. Ponce en el Palacio de Bellas Artes a las 18:00 hrs. Éstos serán los primeros recitales de la generación 2022.

El programa de residencias, además de ofrecer la especialidad para cantantes de ópera en categorías de participación como barítonos, bajos, contraltos, contratenores, mezzosopranos, sopranos y tenores, también ofrece residencias para pianistas preparadores.

Daniel Cruz, pianista mexicano egresado del Conservatorio Nacional de Música, fue seleccionado para la generación 2022 del EOBA como pianista preparador. El joven complementó su formación con clases magistrales en Berlín. Actualmente se perfecciona como vocal coach de ópera con el reconocido pianista Ángel Rodríguez.

Se ha presentado en importantes recintos como la sala principal del Palacio de Bellas Artes, el Orpheum Theater, Herberger Theater Center, Phoenix Art Museum, La Jolla Commumity Center y Ruth Chapman Performing Art Center, en Estados Unidos. Ha participado en el Festival Cultural de Mazatlán y el Festival Cultural Alfonso Ortiz Tirado, y ha colaborado con la Ópera de Bellas Artes.

“Estoy muy emocionado por los conciertos que vienen, es el primer concierto de esta novena generación, y con un programa de suma trasparencia y dificultad como lo es el Bel Canto de Rossini”

El pianista hace hincapié en que Gioachino Rossini esta coronado como uno de los reyes del Bel canto, autor de icónicas óperas como “El barbero de Sevilla” y “La cenicienta”. Dicho compositor siempre ha sido motivo de controversia debido a su gran dificultad para ejecutar sus obras aunado a que, a los 37 años, justo en la cumbre de su carrera ya habiendo escrito sus mayores éxitos operísticos, dejo de componer.

“Desconocemos al día de hoy a ciencia cierta el por qué… Para nosotros como representantes de esta generación del EOBA es una gran responsabilidad presentar un concierto de esa magnitud” explica Daniel Cruz.

Por su parte, Génesis Moreno comparte su emoción y dedicación por los próximos conciertos puesto que se identifica con Rossini puesto que es alegre, ágil y fresco.

“Me tiene muy emocionada, la selección de arias y ensambles es maravillosa, resalta aspectos muy variados de las composiciones de Rossini que podrán ver en el recital que nos tiene tan emocionados”

Daniel cruz explica que acompañar cantantes es una oficio sumamente bello y apasionante, muy diferente al pianista solista, sin demeritar, aclara, que es una carrera más solitaria e introspectiva.

“Aquí el cantante se vuelve tu instrumento y a la vez el pianista se vuelve instrumento del cantante… hay una complicidad que toma muchos años y mucho trabajo desarrollar, tiene que haber un amor profundo por la voz, por el canto, por la música y por supuesto por el cantante”

El pianista acompañante es multifacético, tiene que estar preparado en idiomas porque si bien la ópera tuvo su origen en Italia, están en todos los idiomas, además que deben tener conocimiento del repertorio.

“Tenemos que tener gran conocimiento del repertorio, de cada compositor, de cada época, cada estilo, e incluso cada cualidad del cantante, cada uno tiene sus propias necesidades sus propios tiempos, y para todo eso tiene que estar listo el pianista, aquí viene otra cualidad que nos diferencia de pianistas en otros rubros” asevera el pianista.

El pianista de la ópera debe tener una muy desarrollada capacidad de lectura, leer las líneas de los cantantes, la letra, investigar de las partituras orquestales que son otra cantidad mucho mayor de claves y cualidades como los instrumentos transpositores.

El Estudio de Ópera de Bellas Artes ha favorecido a la formación de 96 cantantes y 16 pianistas participando en talentosas producciones de ópera nacional tales como: Rigoletto y La Traviata, de Giuseppe Verdi; El elixir del amor, de Gaetano Donizetti. Además, estrenos como La güera, de Carlos Jiménez.

“(El pianista acompañante) Es, en resumen, un director musical, a la vez que representa la mayoría de veces la orquesta en el piano… estamos trabajando arduamente y con gran entusiasmo junto a nuestros maestros.” comparte Daniel Cruz.

Génesis Moreno y Daniel Cruz manifiestan su orgullo al ser beneficiarios del Estudio de la Ópera de Bellas Artes que pertenece a la máxima casa de ópera de este país, la Compañía Nacional de Ópera.