
En México el 50 por ciento de los adultos (de los 18 a los 74 años) sufren ansiedad; se presentan más casos en hombres que en mujeres debido a que ellas tienen más herramientas afectivas para enfrentarse a los cambios, explicó a Crónica Benjamín Domínguez Trejo, Investigador de la Facultad de Psicología de la UNAM.
Un indicador de ello es que hay más viudas que viudos, detalló Domínguez Trejo, “por cada 20 viudas sólo hay un viudo”. Hay más casos de ansiedad en los estados que registran mayor población, como el Distrito Federal, Monterrey y Guadalajara.
Albar Colonia, Jefe de la Unidad de Consulta externa del Hospital Psiquiátrico Fray Bernardino Álvarez, describió la ansiedad como la respuesta de un sistema de alarma que prepara al organismo para enfrentar un peligro potencial.
Bajo condiciones normales la sintomatología llega a ser imperceptible, pero cuando es intensa la persona experimenta una sensación de inquietud, dificultad para concentrarse, palpitaciones, sudoración e incremento en la tensión muscular, dijo el psiquiatra.
Albar Colonia indicó que cuando la ansiedad es generalizada predomina la preocupación excesiva no justificada, una sensación de que algo va a salir mal, que se va a recibir una mala noticia.
Se trata de un trastorno crónico que evoluciona con el paso del tiempo, “son esas personas exageradamente preocuponas, que tienden a magnificar los eventos. Por ejemplo, pasa una ambulancia y la persona ya está pensando que algo le sucedió a su familiar, codificando la información en sentido catastrófico”.
En cuanto a las causas, el psiquiatra detalló que no existe la relación causa-efecto, participan factores biológicos, psicológicos y sociales, “en salud mental la primera ley de la termodinámica ya está superada (a toda acción sigue una reacción de fuerza igual y en sentido inverso), no hay una cosa en particular que la ocasione”.
Bases biológicas. El cerebro tiene muchos sistemas de comunicación que coordinan los órganos de los sentidos, la visión, el tacto, el gusto, estar de pie o sentado, etcétera; además existe información diversa como la temperatura, la frecuencia cardiaca, el estado de ánimo. Uno de los sistemas que maneja esta cantidad de información está integrado por los neurotransmisores, los más involucrados son la noradrenalina y serotonina (excitatorios), y el ácido gama aminobutílico (inhibitorio, es decir que disminuye la ansiedad). Albar Colonia indicó que los neurotransmisores están ubicados en el lóbulo límbico, conocido como cerebro medio.
Fobia. La fobia se caracteriza por tener un miedo irracional, no justificado hacia algún objeto o situación particular, “la fobia a las alturas es un miedo que tiene la persona a subir a lugares que están a mucha altura”.
Las fobias están clasificadas dentro del grupo de trastornos por ansiedad, “hay fobias específicas, como la que sienten las personas por los espacios cerrados o abiertos; la fobia social, cuya variedad es el miedo intenso a hablar con personas que no se conocen o a hablar en público”.
Estudios. El psiquiatra señaló que a la fecha, “tenemos una serie de información en donde se registran cambios a nivel cerebral, particularmente en el sistema límbico”. El estrés es un factor causal en los desórdenes afectivos como la ansiedad, por ello existe una estrecha relación entre este trastorno y el estrés.
En animales de laboratorio la ansiedad se acompaña de alteraciones de conducta que tienden a ir hacia los extremos; en algunos casos se detecta un incremento en la actividad locomotriz, y en casos extremos es común observar una inmovilidad que llega prácticamente a paralizar al animal.
* Factores
Entre el grupo de factores que intervienen en el trastorno de la ansiedad está el social, por ejemplo vivir en una zona de alta delincuencia; sin embargo, de acuerdo con Benjamín Domínguez, “es fundamental analizar la etapa que vive la persona afectada”.
* Cambios
Entre mujeres y hombres, solteras y casadas varían, generalmente cualquier cambio brusco en nuestra vida y hábitos nos puede llevar a un estado de ansiedad, el que lo interpretemos como una amenaza puede ser un factor productor de ansiedad.
* Ansiedad
Es importante diferenciar un estado normal de ansiedad, ya que no todas las personas que tienen ansiedad están mal, apuntó el psicólogo de la UNAM, “si alguien se quedó sin empleo y siente ansiedad es totalmente normal, o si alguien se quedó sin su pareja con la que se entendía a la perfección.
Alteración ligada al estrés
Benjamín Domínguez explicó que la ansiedad es una sensación de inquietud que altera el sistema nervioso del individuo que bajo condiciones extremas de estrés llega a ocasionar falta de concentración, insomnio, palpitaciones, sudoración de manos.
Se trata de un proceso evolutivo y llega a ser necesaria la intervención de un psicólogo mediante terapias cuando la persona afectada pierde el control sobre su propia vida, “un síntoma de ello es el insomnio, además de la incapacidad para desarrollar su vida laboral o familiar”.
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