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El proyecto global que elabora la UNESCO para salvar a Xochimilco del colapso ambiental carece de las herramientas necesarias para aplicarlo sin que el sitio se convierta en un lago artificial y pierda su calidad de patrimonio de la humanidad.
Las inundaciones en distintas partes de los canales se deben a la sobreexplotación de los mantos acuíferos, lo que sería “muy difícil” restaurar sin convertir el sitio en un ecosistema artificial, afirmó a Crónica María Francisco Naranjo, encargada del problema del agua en Xochimilco por parte del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (ICOMOS), filial de la UNESCO en México.
En un intento de impedir que las famosas trajineras que pasean por los canales de Xochimilco dejen de zarpar en unos años, la UNESCO, por medio de ICOMOS, decidió intervenir con un plan global que se aplicará en 2005 para que no “pierda su autenticidad”.
Pero el proyecto, que será implementado el próximo año y cuenta con un presupuesto de 200 millones de pesos, contempla la restauración del sitio como un “museo”, agregó la especialista.
El plan aún no tiene la solución al problema sino “encerrando” sus aguas y canales y convirtiéndolo en “un lago artificial”, con lo cual perdería su “autenticidad” y por ende, dejaría de ser patrimonio nacional.
“Debido al peligro ambiental al que se enfrenta se han planteado muchos proyectos para que Xochimilco no entre en un colapso ambiental, sin embargo, ninguno de ellos puede ser de manera natural sin afectar a la población de la Cuenca de México”, agregó la especialista.
Así, el ecosistema de Xochimilco, considerado patrimonio de la humanidad por la UNESCO desde 1986, está a punto de perder esa etiqueta, sentenció la doctora en ingeniería hidráulica.
Medidas. Sin embargo, el plan de ICOMOS, que está siendo elaborado por unos 200 expertos, continúa buscando la forma de que Xochimilco “regrese a la normalidad” a pesar de la falta de agua y los hundimientos de la zona, informó la experta.
“Xochimilco funciona como presa porque necesita esclusas para remansar el agua y toda ésta depende de la Planta de Tratamiento del Cerro de la Estrella porque ya no existen manantiales naturales, este es el principal problema al que se enfrenta, ya que la falta de agua provoca las inundaciones diferenciales”, explicó.
Por una parte, las tradicionales chinampas sufren de inundaciones que impiden su crecimiento y terminan destruyéndolas, mientras que en la zona turística pasa todo lo contrario, ya que baja el nivel del agua y es más difícil que las trajineras puedan navegar.
El problema viene de 60 años atrás y hasta hoy se valora su magnitud.
Para María Francisco Naranjo, otra circunstancia en contra de Xochimilco como patrimonio cultural es que “uno de sus monumentos históricos, que lo ha caracterizado por años, está casi en extinción”.
Se trata del aguejote, el árbol clásico que nace en sus canales y que junto con las chinanpas se ve afectado por la erosión provocada por el vaivén de las propias trajineras y por las carpas y peces que comen de ellos y los debilitan haciendo que mueran.
“Con el plan de acción queremos reparar estos problemas pero no como lo han hecho hasta ahora las autoridades que sólo han tapado los hoyitos sin solucionar el problema de fondo”, concluyó la doctora.
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