En 1971, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) desarrolló el programa “Hombre y Biosfera” (Man and Biosphere, MaB) con el objetivo principal de compatibilizar las actividades humanas con la conservación de la biodiversidad. A partir de este programa se desarrollaron nuevos criterios para la creación de nuevas Áreas Naturales Protegidas (ANP) que incluyeran la participación de las comunidades humanas locales, las actividades productivas sustentables y la investigación científica aplicada a la conservación en dichas ANP como elemento esencial. Así, el 18 de julio de 1979, el Gobierno Federal, el Gobierno del Estado de Durango, el Instituto de Ecología, A.C. (INECOL) acordaron la creación formal de las dos primeras Reservas de la Biosfera en México: la Reserva de la Biosfera La Michilía (RBLM) y la Reserva de la Biosfera Mapimí.

La Reserva de la Biosfera La Michilía fue creada con la intención de conservar y preservar los bosques templados secos de la Sierra Madre Occidental en una superficie de 35,000 hectáreas. Para el establecimiento de esta reserva, teniendo como centro de actividades la Estación Biológica Piedra Herrada, personal científico del INECOL realizó estudios de biodiversidad y, posteriormente, asumió su administración, gestión y seguimiento hasta el año 2000. El 5 de junio del año 2000, el Gobierno Federal creó la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) para proteger el capital natural de México y hacerse cargo de la administración de todas las ANP del país.

En México, las ANP son reconocidas por logotipos que simbolizan un paisaje y/o especies representativas del área protegida. En el caso de la RBLM, los representantes son el Chichimoco (Neotamias bulleri) y un cono o piña de pino (posiblemente Pinus cooperi, P. engelmannii o P. lumholtzii).

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El Chichimoco es una ardilla terrestre endémica de México. Es de tamaño pequeño de color café grisáceo, con el vientre gris claro y presenta una serie de bandas longitudinales, tanto en la cara como en el cuerpo. Habita en los bosques templados de pinos y de pino-encino al sur de la Sierra Madre Occidental, en los estados de Durango, Zacatecas y Jalisco. Está catalogada como especie vulnerable según la lista roja de la IUCN, y aunque es endémica, no está incluida en la actualización del 2019 de la Lista de especies en riesgo de la Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010.

De acuerdo con la plataforma “enciclovida” de la CONABIO (https://enciclovida.mx/especies/36774-neotamias-bulleri), esta especie se considera localmente abundante. Sin embargo, sugieren que el aumento de la población humana y el cambio climático pueden propiciar cambios en sus poblaciones. Esto último se ha detectado recientemente a partir de comentarios de los pobladores de la Reserva de la Biosfera La Michilía en respuesta a algunas entrevistas aplicadas en el 2023 del proyecto estratégico “Conservación de la Biodiversidad y Áreas Naturales Protegidas”. En ellas, varios habitantes mencionan que “hay pocos [chichimocos], ya casi no se ven”. Esta respuesta es compartida en diferentes localidades de la reserva como San Juan de Michis, Rancho de La Peña y Alemán.

Hace más de una década se reportó que los bosques templados y fríos de la Sierra Madre Occidental representan un recurso forestal muy importante, se encuentran sometidos a una acelerada tasa de deforestación, fragmentación y reducción de su densidad arbórea. Por ello, se piensa que muy probablemente la deforestación, el uso poco sustentable de los recursos forestales y los incendios en la RBLM están afectando a las poblaciones de esta pequeña ardilla. Según la Global Forest Watch, que es una plataforma de monitoreo de los bosques a nivel mundial fundada por el World Resources Institute (WRI), en los últimos 20 años en México se han perdido 736 mil hectáreas de bosques primarios. El proyecto GREENMEX (2023-2027), organizado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR), la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) y la CONANP, busca incorporar la conservación de la biodiversidad, la gestión integrada del paisaje y la conectividad de los ecosistemas en la porción sur de la Sierra Madre Occidental en Durango y Nayarit. Así mismo, el Programa Estratégico Forestal 2030 del estado de Durango promueve la sustentabilidad de los ecosistemas forestales con su conservación, restauración, protección, fomento y aprovechamiento y el fortalecimiento de la cultura e investigación forestal y el desarrollo tecnológico.

Si bien, el conocimiento del estado de actual de conservación del Chichimoco aún depende en gran medida de estudios específicos de su dinámica poblacional, los investigadores esperan que con esta información, en conjunto con el programa de manejo de la RBLM y el cumplimiento de los objetivos de las estrategias de conservación de los bosques templados y fríos de la Sierra Madre Occidental, puedan ser orientadas a mitigar el impacto de las actividades humanas y riesgos ambientales (incendios y sequia) sobre las especies nativas, principalmente las endémicas, y que además, sean suficientes y en tiempo para mantener poblaciones viables a largo plazo del emblemático Chichimoco y otras especies clave de la Reserva de la Biosfera La Michilía.

Para saber más:

Álvarez-Castañeda, ST, Lacher, T., Vázquez, E. 2016. Neotamias bulleri. Lista Roja de Especies Amenazadas de la UICN 2016: e.T21356A103309807.

https://dx.doi.org/10.2305/IUCN.UK.2016-3.RLTS.T21356A103309807.en

Neotamias bulleri (J.A.Allen, 1889) in GBIF Secretariat. 2023. https://www.gbif.org/es/species/4972384. Revisado en GBIF.org el 08-01-2024.

"La opinión es responsabilidad de los autores y no representa una postura institucional"

* Conservación y Manejo de Fauna - Enlace Durango

Secretaría Técnica. Instituto de Ecología, A.C.

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