
Científicos de la Universidad Nacional Autónoma de México crearon el Refleximetro, un aparato computarizado capaz de medir el grado de alteración funcional de los músculos de la masticación y que es el primero del mundo en su tipo.
En un comunicado, la Máxima Casa de Estudios da a conocer que un grupo multidisciplinario, encabezado por Fernando Ángeles Medina, de la División de Estudios de Posgrado e Investigación (DEPI) de la Facultad de Odontología (FO), llevaron a cabo el diseño y construcción del instrumento.
Con este aparato, explica Ángeles Medina, se puede conocer mediante un registro gráfico y valores numéricos, la actividad muscular en esa parte del cuerpo, así como el funcionamiento de la articulación temporomandibular —ubicada entre el hueso temporal y la mandíbula—.
Entre sus cualidades, señala, está el ser compacto y tiene la ventaja de poderse aplicar en todas las especialidades odontológicas (ortodoncia, endodoncia, prótesis y dentaduras completas, entre otros) en cualquier etapa del tratamiento para hacer una evaluación integral.
Indicó que después de más de una década de investigación y el desarrollo de diferentes prototipos, ahora se cuenta con un equipo digitalizado y de tamaño reducido, especificó.
Es una pequeña computadora o “caja” que contiene un software creado por los universitarios, el cual permite el procesamiento de las señales que se reciben del paciente mientras mastica con ayuda de electrodos y que se pueden observar en un monitor.
En la máquina se tiene un registro personalizado. El sistema acumula las señales, las filtra, rectifica y posibilita la graficación con ayuda de operaciones matemáticas, abundó Ángeles Medina. Como en el caso de los análisis sanguíneos, los resultados pueden estar dentro o fuera de los rangos normales aunque en este caso, se trata del comportamiento de los músculos.
“La meta es que los dentistas cuenten con esta herramienta en sus consultorios, que lo mismo puede funcionar en una computadora de escritorio que en una portátil. Este desarrollo está patentado por la UNAM y se puede hacer una transferencia de tecnología a alguna empresa interesada en comercializarla”, indicó.
En tanto eso ocurre, la gente puede acudir a la DEPI de la FO para conocer en 15 ó 20 minutos el estado funcional de sus músculos masticatorios y articulación, puntualizó.
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