Cultura

Tres obras maestras de Claude Monet llegan al Museo Nacional de Arte

“Es una exposición íntima que muestra la fuerza del Impresionismo, señala el curador Héctor Palhares. Abre este jueves 27 de abril al público

La obra “Paisaje en Port-Villez”, de Claude Monet.

La obra “Paisaje en Port-Villez”, de Claude Monet.

Tres obras del artista francés Claude Monet llegan por primera vez al Museo Nacional de Arte: “Nenúfares (1908), “Valle Buona, cerca de Bordighera” (1884) y “Paisaje en Port-Villez” (1883), piezas que junto con nueve cuadros de artistas mexicanos narran cómo el Impresionismo transformó el gusto estético en el mundo, todo ello en la exposición “Monet. Luces del Impresionismo”.

La muestra, que estará abierta del 27 de abril al 27 de agosto, busca un encuentro íntimo ya que, de acuerdo con el curador Héctor Palhares, la apuesta del Munal son exposiciones con pocas obras para que el público tenga un mejor acercamiento a éstas.

“Es una exposición íntima, una exposición que reúne 12 obras maestras y dos de éstas del maestro Monet que por primera vez llegan a México del Museo de Arte de Dallas, el célebre caso de los “Nenúfares” y una vista de un paisaje italiano en Bordighera; a éstas se suma el paisaje de Port-Villez procedente de la colección del Museo Soumaya que también es la primera vez que sale de su sede para presentarse en otro museo”, expresó el curador.

El que sean únicamente tres obras de Monet ofrece un respiro y una calidez al público, añadió Palhares. “Es una verdadera relación como invitados a la casa de Monet, en un espacio íntimo donde cada obra tiene su lugar; no hay rellenos, no hay protagonismos o papeles secundarios”.

La obra “Nenúfares.

La obra “Nenúfares.

En el Museo de Arte de Dallas existen siete obras de Monet, sin embargo, las dos que prestaron en comodato al país son las obras estrellas, afirmó el curador.

En el caso de “Nenúfares” explicó que es una pieza maestra porque ocasionó que el gobierno de París le pidiera a Monet los grandes formatos que hoy forman parte de Orangerie, célebre galería dónde se resguardan las más de 250 versiones pintadas de nenúfares a lo largo de 40 años.

“Aquí hay una de las primeras, de las nodales, con su formato moderno, con su magnífica pincelada, con el juego del color puro, con los empastes, con esas manchas o impresiones de luz”, dijo.

Palhares señaló que Monet, creador del Impresionismo, es un artista de inclusión y de imaginario compartido del que no se necesita tener una clase previa para disfrutarlo y vivirlo.

El cuadro “Valle Buona, cerca de Bordighera”.

El cuadro “Valle Buona, cerca de Bordighera”.

“El Impresionismo nos acoge, nos reencuentra con la naturaleza, de ahí su gran éxito, nos acerca a lo que somos, nos acerca a lo que (pasa desapercibido) en nuestra cultura de hiper modernidad de concreto, vorágines y caos cotidiano; es un guiño con la naturaleza”, indicó.

El también director del Munal comentó que el Impresionismo es la corriente estética que siempre atrae a más público y la que crea mayor expectativa.

Palhares narró que el Impresionismo, en sus orígenes, fue denostado, criticado y rechazado, y que el nombre del movimiento proviene de una nota periodística que lo nombró de esa manera en un sentido despectivo, de cómo el arte moderno podía nacer de impresiones de luz, de manchas de color y de paisajes difuminados.

También advirtió no ver como menores a los impresionistas mexicanos. “Me refiero a artistas mexicanos de enorme envergadura, de la talla de nuestro gran campechano Joaquín Clausell, de la mano de Mateo Herrera, de Armando García Núñez, de artistas que trajeron toda la corriente impresionista a nuestro país”, dijo.

Clausell conoció a Monet en su estudio en Giverny y fue testigo presencial de los nenúfares en esa casa que hoy es museo, añadió Palhares.

“Clausell fue el gran portavoz de los estudios de Monet en México, entonces buscamos sentarlos a todos en una misma mesa y compartir un banquete, ese banquete que es la luz y el color en el paisaje. Estos grandes maestros mexicanos incursionaron en la pintura al aire libre, salir del taller, salir de la academia, tomar directamente los motivos bajo la luz palpitante del sol”, detalló.

EXPOSICIONES PEQUEÑAS

Héctor Palhares reiteró que en el Munal apostará por exposiciones pequeñas. “Esas exposiciones multitudinarias de 300 o 400 piezas se vuelven, de pronto abrumadoras, se etiqueta de alguna manera el gran blockbuster -como le llamamos en el lenguaje común- de una exposición de donde a veces se nos escapan las piezas, el recorrido y nos vamos a la grandilocuencia”. En palabras del director, se ponderará lo que en el Barroco y en la Ilustración fueron las exposiciones de gabinete.

¿DÓNDE?

El Museo Nacional de Arte se ubica en Tacuba 8, Centro Histórico, CDMX y abre de martes a domingo, de 10:00 a 18:00 horas. Costo general $85.