El eclipse del futbol mexicano se ha dado al mismo tiempo que el crecimiento del futbol estadounidense. Y no es casualidad, pero ese crecimiento se ha notado más a nivel selección, y no en cuanto a clubes.

La rivalidad futbolera entre México y Estados Unidos ha llegado a nuevos niveles con el crecimiento de la MLS y el dominio actual de la selección de las barras y las estrellas sobre la mexicana.

Esta semana tendremos un nuevo capítulo, ahora en clubes, con la Concacaf.

Con las idas ya resueltas, América lo tiene ya casi cerrado sobre New England, Rayados tiene ventaja sobre Inter Miami pero el factor Messi siempre será un diferencial y el argentino si jugará el miércoles en Monterrey, y finalmente el duelo entre Tigres y Columbus es el más cerrado, con ventaja para el equipo mexicano aunque Columbus es el campeón de la MLS y por lo tanto no se le debe descartar.

La presión por no calificar

La crisis de la selección mexicana, y del futbol mexicano en general, no comenzó a partir de Qatar 2022, los primeros síntomas se dan desde la eliminación en Corea/Japón 2002, precisamente con Estados Unidos. La presión por no calificar al quinto partido, y quedarnos en octavos de final, comenzó desde ese Mundial.

Sin contar la Leagues Cup del 2023, los equipos mexicanos dominan ampliamente a los de la MLS. Desde el 2005, 17 equipos mexicanos han ganado el torneo de la CONCACAF, por un tico y tan solo un estadounidense.

En las 8 finales entre equipos mexicanos y estadounidenses desde 1997, seis las han ganado los mexicanos por tan sólo dos triunfos de EU.

¿Por qué si a nivel de selección llevamos 7 partidos sin ganarles, desde el 2019, la diferencia es tan grande todavía a nivel de clubes?

El nivel de los extranjeros

Hay varias razones, una de ellas es la del nivel de los extranjeros, y es que todavía en México el nivel promedio es mayor que los de la MLS. Si bien hay figuras de la talla de Messi, Suárez, Busquets o Alba, en general, por equipo, son máximo dos los nombres importantes, y el resto de extranjeros tienen una calidad menor todavía.

Ese tema va de la mano con el tope salarial de la MLS, la cual les impone a los equipos un límite para gastar en sueldos de jugadores, y es ahí donde creo que está el principal factor para que se hayan atorado.

Cada equipo de la MLS puede tener hasta tres “jugadores designados”, que reciben un sueldo mayor al del resto del equipo, y es por eso que sus sueldos no son tan elevados para el resto como podrían serlo.

En México pueden registrar hasta 9 no formados aquí, y un máximo de 7 en cancha.

No hay tope salarial. De acuerdo en que muchos extranjeros no son de nivel, pero generalmente los equipos que juegan en la Concacaf son quienes mejor base de foráneos tienen en nuestro país.

Los clubes ya se están quejando

Cuidado cuando quiten ese tope salarial, para lo cual no creo que falte mucho, pues los clubes ya se están quejando.

Esta semana quedarán definidas las semifinales y las probabilidades de que sean cuatro equipos mexicanos son muy altas. América y Pachuca de un lado están ya prácticamente calificados, y los regios llevan ventaja a la vuelta, por lo que es muy probable que el dominio mexicano continúe.

A nivel selección ya es otra cosa, ahí si nos han superado, pero si analizamos el último plantel estadounidense, solamente dos jugadores militan en su liga local. Esa es una de las razones de su crecimiento.