Escenario

‘Barrabrava’, una historia teñida por la violencia en el fútbol

La serie creada por el cineasta argentino Jesús Braceras que llegó este viernes a las pantallas de Amazon Prime Video

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Imagen de 'Barrabrava'

Imagen de 'Barrabrava'

Especial

La influencia de los barrabravas va mucho más allá del fútbol: sus cabecillas llegan hasta los medios de comunicación, tejen vínculos con la política y gozan de complicidades en las fuerzas policiales; creando un entramado social atravesado por el deporte, la ambición y el poder.

Ese universo tan particular de los ultras, con sus códigos, leyes y características propios, es lo que envuelve la trama de Barrabrava, una historia de personajes creada por el cineasta argentino Jesús Braceras que llegó este viernes a las pantallas de Amazon Prime Video.

Es una serie que trata de evitar el juicio. Siempre preguntan ‘¿quién es el malo?’, y acá no hay. Los que son malos, de golpe son buenos; y los que son buenos, de golpe son malos, porque se busca ir a la humanidad y a los matices de todas las personas”, asegura a EFE el actor Matías Mayer, quien interpreta el personaje de 'Polaco', uno de los protagonistas de la serie.

VIOLENCIA Y TERNURA

Compuesta por ocho episodios en su primera temporada, Barrabrava relata la historia de César (Gastón Pauls) y ‘Polaco’, dos hermanos expulsados de la barra brava del ficticio Club Atlético Libertad del Puerto tras una brutal pelea interna que acaba con la vida del hasta entonces líder del grupo, ‘El Tío’ (Gustavo Garzón).

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Ese primer capítulo, que anticipa la guerra que librarán ambos hermanos contra el resto de los ultras, sirve como carta de presentación de los barrabravas, sectores de fanáticos violentos que, en países como Argentina, desarrollan múltiples actividades que poco o nada tienen que ver con el fútbol.

Todo argentino y toda argentina sabe lo que ocurre con los barrabravas, que ojalá fueran solamente esos hinchas un poco más bravos que el resto: están conectados con políticos, con medios de comunicación, con la Justicia, con la Policía misma (...). Ya sabemos esto, y el partido sigue, lamentablemente”, afirma Pauls.

Sobre ese trasfondo de pasión y violencia alrededor de los barras, donde no faltan las escenas filmadas desde la cancha, Braceras despliega un drama en el que cada personaje transita diferentes conflictos internos, demostrando que, incluso en contextos marcados por la brutalidad, hay lugar para la ternura.

La serie habla mucho de eso, de cómo algunos personajes pueden ir descubriendo la luz a través de relaciones con hijos, compañeros o hermanos. Eso sí nos toca y hay un punto donde cualquier personaje termina siendo un ser humano”, apunta Pauls.

EMPATIZAR CON LOS BARRAS

En un contexto narrativo que, por momentos, irradia altísimos niveles de testosterona, las protagonistas femeninas de Barrabrava vienen a traer sensibilidad, pies en la tierra y conexión” entre los personajes, según resalta Cande Molfese, responsable de dar vida a Luciana en esta ficción.

Quizás alguien se imagina un barra y se imagina algo súper frío, cuando, en realidad, nada que ver. Ahí empezás a ver sensibilidad entre todos esos barras que antes, si no ponías a su hija, a un amor o a su madre, esas sensaciones quizás no las sentían”, aseveró, por su parte, Violeta Narvay, quien encarna el rol de Ximena.

Para la actriz Liz Solari, Barrabrava se inspira en un universo masculino, sí, pero las mujeres resultan claves en la evolución emocional del resto de protagonistas, como es el caso de su personaje, Celeste, que en la serie está casada con un futbolista profesional.

“Esto me parece interesante, porque muestra también cuán importante es ese rol de las mujeres que están acompañando a los futbolistas o que son mujeres de barrabravas, o madres, o hijas; porque así se compone nuestro universo social y está muy enriquecido”, manifestó la artista.

En los momentos previos al estreno de Barrabrava, Solari no puede evitar sentir “adrenalina” y “entusiasmo” por el lanzamiento final de este proyecto, cuyo rodaje transcurrió en plena pandemia de coronavirus.

Realmente es emocionante y ahora llega el momento en el cual pasa a la gente que lo va a ver, y es esa parte tan rica de poder ver qué es lo que los tocó, qué les gustó, qué personajes les movilizó, qué piensan de la historia, cómo la sienten... Que es la parte más bella”, sentencia la intérprete argentina.