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Las puertas del Auditorio BB abrieron a las 19 horas mientras los amantes de la música electrónica comenzaban a hacer acto de presencia en el recinto para presenciar el show de Polo y Pan, el dueto de músicos franceses quienes llegaban a la CDMX para presentar su nuevo material.
Alrededor de la entrada ya podíamos presenciar la venta de mercancía del dúo y como no podía faltar, el clásico grito “¿¡Te sobran boletos, te faltan boletos!?” se hacía presente, mientras en la fila la seguridad se encargaba de revisar al público que ya estaba ansioso por entrar.
Inmediatamente al atravesar la puerta nos sumergimos en la oscuridad, mientras las luces del escenario iluminaban a Tonga Conga, encargado de iniciar esta fiesta de lunes por la noche.
El público de pie con su cerveza en la mano grababa y bailaba al ritmo del DJ el cual estaba acompañado de Vanessa Zamora para después continuar junto a Carolina Camacho, quien con su voz maravillaba a los asistentes.
Las luces bailaban junto al público al ritmo de la música, mientras Tonga Conga pedía palmas arriba para así despedirse de los fans quienes gritaban felices.
Después de esta presentación el público ya estaba listo para el show principal, mientras la oscuridad se atenuaba con una luz azul todos los miembros del staff preparaban todo para darle la bienvenida a los DJs.
Fue pasando las nueve cuando las luces se oscurecieron en su totalidad y el grito del público se hizo presente para así dar comienzo a la magia de los franceses.
El Auditorio BB comenzó a latir fuertemente, mientras en la pantalla gigante un corazón se comenzaba a divisar y debajo la silueta de ambos dj se comenzaba a divisar, lo que provocó el grito de euforia del recinto, en el cual no cabía ni un alma más.
Seis luces en el escenario, sumando las que estaban sobre ellos, comenzaban a bailar al ritmo de “Côme” provocando la fascinación de los fans quienes bailaban y gritaban en cada oportunidad “¡Ciudad de México, wooow!” Fueron las palabras de los dj para después seguir poniendo a bailar a todos.
“Hola ciudad de México, ¿cómo están?, es un gran placer estar aquí con ustedes, están listos para el show”, mencionó Paul Armand-Delille (Polo) para comenzar a cantar “Feel good” mientras bailaba sobre el escenario, logrando que el público lo motivará con un clásico “eh, eh, eh”.
Los visuales eran algo increíble, la forma en que los colores y las formas se mezclaban al ritmo de la música era sin duda un plus para todos los fanáticos quienes uno junto a otro bailaba como si la música se apoderara de ellos poco a poco.
La gente desbordaba su euforia con cada salto que daba, había otros que no paraban de gritar y otros quienes disfrutaban con los ojos cerrados.
Escuchar cantar a Victoria Lafaurie cómo su fuera un robot en el tema “Attrape-rêve” fue sin duda increíble y más cuando se le sumó Alexandre Grynszpan (Pan) para cantar juntos “Arc-en-ciel” y dejar a todo el público impresionado por la canción, por el baile entre ambos y por la energía transmitida.
Los músicos no hacían más que aumentar la energía del público, el “boom” del bajo lo podías sentir dentro de ti y este te obligaba a bailar mientras las luces te llevaban a un trance provocado por los DJ’s.
“Muchas gracias México” fue el mensaje que dieron nuevamente para continuar haciendo bailar a la gente.
La euforia era tal que el piso comenzó a vibrar debido a los saltos con tanta energía que daban todos los asistentes, mientras el grito y la ovación se mezclaban con el beat para crear un ambiente completamente festivo.
“Que energía, México siempre han sido el corazón de Polo and Pan”, mencionaba Polo en español, lo que provoca aún más el grito por parte de sus fans, la noche seguía, el baile no paraba, el grito era algo continúo y la alegría era notoria por parte de los dj, quienes se veía que la estaban pasando increíble.
Cuando “Ani Kuni” comenzó a sonar el público explotó de euforia, comenzaron a cantarla a todo pulmón para sorpresa de los músicos quienes no hicieron más que agradecer.
La diversión no paraba y Polo era el que constantemente jugaba con el público, los hacían levantar la mano, gritar e incluso hincarse para después dar un enorme salto.
Por último y como no podía faltar llegó el turno de “Magic” y “Peter Pan” cerrando así un show sin dudas increíble lleno de luces y energía.
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