Hablando de cine, el 2023 ha sido un viaje extraordinario. Es un arte que no decepciona. Tantas historias, tantos personajes, tantos momentos que atraviesan el alma. Tanta belleza, tanta estética, tanta rabia, tanta fuerza. Tantos adjetivos que podrían definir lo que sentimos por el cine. Ya no sé cuántas vidas hemos vivido a través de la pantalla grande o a cuantas emociones nuevas o extraordinarias hemos estado expuesto para beneplácito del alma.

Desde nuestra labor periodística cada año nos sumamos al ejercicio de hacer un top de lo mejor del año y aclaramos el mismo propósito: Servir como un puente de conversación para hablar y profundizar en las películas. Valoramos desde nuestra subjetividad y compartimos nuestras experiencias para que los lectores también se atrevan a hablar de la suya. Como el cine en sí mismo con los directores, actores y artistas haciendo una obra para que llegue a su público. Nuestra contribución periodística es tratar de empujar a nivel visibilidad esos títulos que creemos son imperdibles.

En Crónica Escenario vivimos un año increíble. Nos acercamos a una audiencia más amplia. Expandimos nuestras plumas y nos acercamos a nuestros temas de interés desde más frentes. Este año hemos hecho la cobertura cinematográfica más amplia de nuestra historia como medio.

Además sumamos que parte de nuestro equipo que se encarga de la cobertura cinematográfica forma parte de la comunidad votante en la siguiente entrega de los Globos de Oro y los nombro acontinuación: Saúl Arellano Montoro, Irving Torres Yllán, AJ Navarro y Fco. Javier Quintanar Polanco. Junto a ellos tuvimos la experiencia de otros colaboradores como Antonio Tijerino, la continuidad de amantes del cine como Rivai Chávez o Jonathan Eslui, o la sangre fresca del joven talento Osvaldo Escalante y Danieska Espinosa. Todos ellos parte nuclear del equipo de cine de Crónica Escenario. 

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Cabe decir que en ocasiones la amplitud de nuestra cobertura necesitó de refuerzos por el alcance que tuvimos, motivo por el cual otros autores de nuestra sección apoyaron en el ámbito cinematográfico como fueron David Rosas, Alinne Fragoso, Montserrat RM, Mariana Garibay, Liliana Hernández y Citlalli Luna. A todos muchas gracias por un año maravilloso de crecimiento y consolidación.

Respecto al cine de este año, el autor de este texto agradece a las personas que le han permitido alimentar el hambre de séptimo arte desde los creadores pasando por los cineastas, actores y crews, hasta los exhibidores, festivales, RP’s, acompañantes de cine y conversadores fascinantes sobre las películas que vemos. Además este año reitero el agradecimiento especial a mi sobrino Gael, quien muchas ocasiones ha cambiado sus juegos por acompañarme a ver algún filme. También agradezco especialmente a Emilia Michel, cineasta y maestra fílmica en guión, quien desde hace unos años ha enriquecido mi forma de apreciar y amar el cine como ninguna otra persona. Gracias a los miembros del taller de guión Escamas de las nereidas.

A veces para cinéfilos como nosotros nos cuesta demasiado hacer una selección definitiva de lo que nos parece lo mejor que vimos en el año. Y es necesario hacer unas aclaraciones. Por ejemplo, en algunas listas de otros especialistas del tema aparecen títulos como Los espíritus de la isla, de Martin McDonagh; La ballena, de Darren Aronofsky; El amor según Dalva, de Emmanuelle Nicot; Decision to leave, de Park Chan-wook y Women talking, de Sarah Polley. Estos títulos formaron parte de nuestro top del año pasado que pudimos ver en festivales o funciones especiales y que este año llegaron a la cartelera comercial. Del mismo modo, pero a la inversa, algunos títulos que forman parte de la selección de este año se cuelan tarde porque en el 2022 no pudimos verlos a tiempo de nuestro cierre de edición.

En ese sentido, para un servidor fue imposible ver títulos de los que uno tiene ansias de ver (y que afortunadamente, algunos colegas sí pudieron) y que menciono como posibles filmes interesantes a seguir y que quizás podrán colarse en el top de lo mejor del 2024: Perfect days, de Wim Wenders; American Fiction, de Cord Jefferson; Robot dreams, de Pablo Berger; Io capitano, de Matteo Garrone; El mal no existe, de Ryūsuke Hamaguchi; Un amor, de Isabel Coixet; o Dispararon al pianista, de Fernando Trueba.

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También vale la pena mencionar algunos títulos que no entraron al top de este año pero que forman parte del grupo de filmes que he disfrutado este año. A nivel Latinoamérica: El conde, de Pablo Larraín; Tengo sueños eléctricos, de Valentina Maurel; El caso Padilla, de Pavel Giroud; La pecera, de Glorimar Marrero-Sánchez; Estranho caminho, de Guto Parente; Desperté con un sueño, de Pablo Solarz; Las hijas, de Kattia G. Zúñiga; y Los Bilbao, de Pedro Speroni. De España y Portugal destaco: Lights falls vertical, de Efthymia Zymvragaki; 2000 especies de abejas, de Estibaliz Urresola y Great Yarmouth: Provisional figures.

El cine de habla inglesa que tanto tenemos en nuestra cartelera, especialmente del cine comercial pero también independiente y de autor, vale mencionar títulos como: John Wick 4, de Chad Stahelski; Nunca llueve en California, de Jamie Dack; Háblame, de Danny Philippou y Michael Philippou; The holdovers, de Alexander Payne; Blue Jean, de Georgia Oakley; Reality, de Tina Satter; Ex-Husbands, de Noah Pritzker; May december, de Todd Haynes; Asteroid City, de Wes Anderson; Priscilla, de Sofia Coppola; Guardianes de la Galaxia 3, de James Gunn; Barbie, de Greta Gerwig; The Dead Don’t Hurt, de Viggo Mortensen; The Zone of Interest, de Jonathan Glazer; Los asesinos de la luna, de Martin Scorsese; El asesino, de David Fincher; Maestro, de Bradley Cooper; ¿Estás ahí Dios? Soy yo, Margaret, de Kelly Fremon; Joan Baez: I am a noise, de Miri Navasky, Maeve O’Boyle y Karen O’Connor; Flora y su hijo, de John Carney; How to Have Sex, de Molly Manning Walker, y Muerte infinita, de Brandon Cronenberg.

También hubo piezas del otro lado del mundo que disfrutamos: Smoke sauna sisterhood, de Anna Hints; The apartment with two women, de Sein Kim; Concrete utopía, de Um Tae-hwa; Cielo rojo, de Christian Petzold; Sleep: El mal no duerme, de Jason Yu; Love life, de Koji Fukada; The mountains, de Christian Einshoj; Saint Omer, de Alice Diop; Rapito, de Marco Bellocchio; Pasajes, de Ira Sachs; La chimera, de Alice Rohrwacher; Le otto montagne, de Felix Van Groeningen y Charlotte Vandermeersch; Leonora Addio, de Pablo Taviani; Here, de Bas Devos; Thunder, de Carmen Jaquier; Pianoforte, de Jakub Piatek, y Tiger Stripes, de Amanda Nell Eu.

Hago también una mención especial este año a los títulos de animación que tuvo una producción bastante interesante pero que no logró entrar en mi selección de 25 títulos: Suzume, de Makoto Shinkai; Nimona, de Troy Quane y Nick Bruno; No dogs or italian allowed, de Alain Ughetto; Unicorn Wars, de Alberto Vázquez; El niño y la garza, de Hayao Miyazaki; Chicken for Linda!, de Chiara Malta y Sébastien Laudenbach; Elemental, de Peter Sohn, y Super Mario Bros: La película, de Aaron Horvath y Michael Jelenic. 

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Finalmente, cabe decir que no he mencionado a las producciones nacionales, pues tendrán su propio texto para reconocer la calidad de nuestro cine. Con la esperanza de que este texto despierte su interés y busquen las películas, pero también de que como espectadores no se conforman y podamos exigir más historias de calidad en nuestra cartelera, dejo este top de lo mejor que vi en el 2023:

25. Valentina o la serenidad, de Ángeles Cruz (México, 2023)

La actriz Ángeles Cruz se reafirma como una gran directora de cine. Con una mirada tierna sobre cómo se vive el duelo en la infancia nos presenta el caso de Valentina, una niña que se aferra a creer que su padre ha muerto y mientras esto ocurre nos ofrece la mágica conexión que podemos encontrar en la naturaleza y la inspiración de amor de lo cotidiano, sin olvidarnos del inmenso poder del amor familiar y la amistad.

24. Saltburn, de Emerald Fennell (Reino Unido, 2023)

La gran virtud del nuevo filme de Emerald Fennell radica en la complejidad de su personaje central (con el siempre confiable Barry Keoghan) en un contexto que cuando se lleva al cine a menudo da flojera. Ahora nos pone la historia de un chico universitario que termina encantado por un compañero de escuela y quien le cambia la vida cuando lo invita a conocer a su excéntrica y rica familia en su finca. Un filme sobre cómo la riqueza domina a la humanidad como un parásito.

23. Blondi, de Dolores Fonzi (Argentina, 2023)

La actriz Dolores Fonzi debuta en la dirección con un maravilloso drama. Ella misma da vida a la protagonista, una mujer que vive con su hijo, con quien ha desarrollado un vínculo como de un mejor amigo, de pronto las etapas de la vida ponen en cuestión qué es lo que sigue para cada uno y ahí es donde nos comienza a tocar el alma. Maravillosa la profundidad de su personaje de Blondi, unos diálogos encantadores y una lección de vida sobre el apego.

22. Dream Scenario, de Kristoffer Borgli (EU, 2023)

Uno de los filmes más ingeniosos del año. Borgli , quien ya ha demostrado parte de su talento con su excéntrica Enferma de mí, vuelve a cautivar con la historia de un hombre (Nicolas Cage) al que de la noche a la mañana lo comienza a soñar todo el mundo. El filme va de la fascinación al terror y de paso nos dice que hay formas muy imaginativas de abordar temas actuales como la cultura de la cancelación y las redes sociales.

21. Beau tiene miedo, de Ari Aster (EU, 2023)

Hay películas que cautivan por su rareza. Otros por que se vuelven un reto intelectual. Otros por la actuación de sus personajes. Otro por la bizarra búsqueda de abordar temas comunes. Esto es lo que tiene esta propuesta de Ari Aster. Una reflexión subliminal en una extraña historia sobre las relaciones madre e hijo, que se complica más cuando el protagonista tiene problemas mentales a causa de sus fobias. Quizás no baste verla una sola vez.

20. Cuando acecha la maldad, de Demián Rugna (Argentina, 2023)

El cine de terror no podía faltar en este recuento, especialmente cuando en el mundo se han encontrado formas inteligentes que van más allá del simple susto. Esta vez la joya del año viene de Argentina y es espectacular por la forma en cómo utiliza el lenguaje cinematográfico para representar el concepto de maldad. La figura del demonio se transforma de lo que no vemos a lo tangible, mientras la violencia y el dolor toman la mente de la humanidad. Una experiencia de locura.

19. Babylon, de Damien Chazelle (EU, 2022)

Este filme bien pudo haber entrado en el top del 2022, sin embargo, llegó los primeros días del año. Vale la pena clavarse por tres horas en esta historia que deja de romantizar una de las épocas doradas de Hollywood y que hace eco en dejar de romantizar la fama, la riqueza y el éxito momentáneo de la actualidad. Chazelle especialista en música, nos lleva a un ir y venir de emociones a ritmos diversos, desde la algarabía frenética a la tensión de lo que denigra al ser humano.

18. Little Nicholas, de Amandine Fredon y Benjamin Massoubre (Francia, 2022)

Un homenaje a los orígenes de la creación artística con la magia que permite el cine de animación. Nos adentra de una forma bella al momento en que Saint-Germain-des-Prés, Jean-Jacques Sempé y René Goscinny dan vida a El pequeño Nicolás, un niño risueño y travieso en forma de caricatura. El personaje se relaciona con sus creadores y a través de su encuentro reflexionan sobre el sentido de sus vidas. Un filme abrazador.

17. Cerrar los ojos, de Víctor Erice (España, 2023)

El maestro Víctor Erice se toma su tiempo para dar una lección de sutileza. En el filme un cineasta es invitado a hablar sobre el misterio de la desaparición de su amigo y actor en un programa de televisión. Ese momento no solo vuelve a poner la atención desde un drama criminal para resolver el caso, sino que también hace reflexionar al cineasta sobre el valor de su obra y más profundo aún, Erice toca al espectador desde la metaficción sobre el significado que es ver una película. Casi tres horas para construir un momento inolvidable.

16. El castigo, de Matías Bize (Chile, 2022)

Este año llegó al Festival Internacional de Cine de Monterrey esta película chilena de Bize quien vuelve a mostrar su sensibilidad ante temas complejos. En una película realizada a un solo plano secuencia plantea una serie de cuestiones morales que van sobre la maternidad, la responsabilidad afectiva, la tortura de lo cotidiano y la resistencia del amor, cuando en la primera escena una pareja decide castigar a su hiperactivo niño al dejarlo solo en un bosque por unos minutos pero al regresar por él desaparece. Tan tensa como deslumbrante.

15. Isla Alien, de Cristóbal Valenzuela (Chile, 2023)

Uno de los documentales más fascinantes que he visto es el acercamiento a este extraño caso. En la década de 1980, durante la dictadura militar chilena, un grupo de radioaficionados comenzó a comunicarse con unos misteriosos seres que afirmaban vivir en la Isla Friendship y tener relaciones cercanas con una raza extraterrestre. Este es el inicio de un documental de ciencia ficción sobre uno de los casos de ovnis más intrigantes de los últimos tiempos. Una exploración donde la verdad y la mentira crean un mitológico delirio con miles de seguidores, sólo comprensible al analizar la mente y el enigmático pasado de su principal protagonista.

14. Tótem, de Lila Avilés (México, 2023)

El cine mexicano mantiene su nivel de propuestas inteligentes y honestas, y es que en el filme de Lila Avilés se siente la forma en que se habla con el corazón al adentrarse en la forma en que una niña sobrelleva la etapa terminal de su padre. La cineasta le da a su película una naturalidad casi documental sobre al desarrollar la historia del día de cumpleaños del hombre desahuciado desde la forma en que su hija trata de entender como el resto de su familia lleva la difícil situación. Además tiene uno de los grandes finales en el cine del año.

13. Anatomía de una caída, de Justine Triet (Francia, 2023)

La ganadora de la Palma de Oro de Cannes es uno de esos filmes de intriga que se mueven en el drama judicial que juegan con tu mente por alentar al espectador a mostrar una postura ante la búsqueda de la verdad. La muerte del esposo de una escritora que no queda clara si ocurrió por suicidio u homicidio es la que marca el punto de partida de un viaje lleno de cambios de perspectiva. Un gran juego mental que se lleva a los tribunales.

12. Safe place, de Juraj Lerotic (Croacia, 2022)

El Festival Internacional de Cine de Guanajuato (GIFF, por sus siglas en inglés) nos permitió ser testigo de esta joya croata. Un intento de suicidio abre una grieta en la existencia cotidiana de una familia. Conforme los protagonistas tratan de acercarse al afectado, sus vidas cambian drásticamente, como si estuvieran librando una guerra invisible contra todos los demás. Un filme crudo y casi desconsolado, pero al que se agradece su honestidad, sobre lo que viven las familias de un suicida.

11. Spider-Man: A través del spider-verso, de Joaquim Dos Santos, Kemp Powers y Justin K. Thompson (EU, 2023)

Nos sumamos a la moción de que este filme de superhéroes es el mejor del año en cuanto a animación se refiere. Cada encuadre está lleno de detalles como pocas veces se ha visto. Se mezclan los tipos de animación conforme ocurre la aventura del personaje arácnido y mientras uno está hipnotizado con la metralla de belleza visual, va encontrando una historia interesante sobre las decisiones y el significado de hacer lo correcto.

10. Le ravissement, de Iris Kaltenbäck (Francia, 2023)

Este filme llegó a México como parte de la muestra de la Semana de la Crítica de Cannes en el Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM). Lástima que no ha tenido los reflectores que merece. Nos acerca a la historia de Lydia, una enfermera que se enfrenta a una ruptura amorosa, mientras su mejor amiga está embarazada y le pide que controle su embarazo. Un día, se encuentra con Milo, una aventura de una noche, mientras lleva en brazos al bebé de su amiga. Un filme que juega con los límites de los daños emocionales con un estilo de thriller psicológico.

9. Hojas de otoño, de Aki Kaurismäki (Finlandia, 2023)

Nos volvemos a rendir al maestro Kaurismäki. Esta vez nos ofrece una comedia romántica de lo más original. Tomando el estilo de vida de su país, poco expresivo pero honesto, nos ofrece el encuentro de una mujer soltera de mediana edad que se conecta sorpresivamente con un hombre alcohólico que conoce en un karaoke. Parece una premisa simple, pero hay que recordar que el estilo del cineasta finés es legendario y acá nos lleva del amor a la melancolía, y de la crítica política a la sinceridad de los sentimientos, en una historia de tantos silencios como contundentes momentos.

8. El Eco, de Tatiana Huezo (México, 2023)

Si de Tótem me referí como un filme que a nivel voyeurista se siente tan natural como un documental, lo que hace Huezo con este documental es que su mirada tenga tanta certeza y sensibilidad que se siente como si fuera una ficción. Nos adentra en la cotidianidad de un pueblo en la sierra y nos ofrece ser testigos de los milagros y conflictos cotidianos. Visualmente impecable, narrativamente cautivador y emotivamente un poema sobre la infancia.

7. La niña callada, de Colm Bairéad (Irlanda, 2022)

Otro de los filmes que bien pudo haber estado el año pasado. Esta es una de esas historias que nos hacen creer en la humanidad. Cuando se acerca la fecha del parto de una madre de familia pobre y disfuncional, manda a su hija de nueve años a vivir con unos parientes lejanos, quienes encuentran en ella una nueva luz que vuelva a iluminar su casa. Un filme que desvela su alma en pequeñas revelaciones, en la empatía de gestos que parecen significativos, que muestran cómo se construye el amor con honestidad. Un filme tierno y doloroso. Mágico.

6. Monster, de Hirokazu Kore-eda (Japón, 2023)

El cineasta japonés es uno de los grandes de nuestro siglo. Quizás sea el más sensible a la hora de hablar de los lazos familiares. Esta vez utiliza la ambigüedad como una herramienta narrativa para conocer la verdad de su historia que es, a través de varias perspectivas, el intento de conocer qué sucede con el comportamiento extraño de un niño, su madre descubre que es a causa de uno de sus profesores y la confrontación inicia el camino a indagar algo más profundo de lo que se nos muestra. El filme cala hondo al invitar al espectador a aceptar lo que uno es en realidad.

5. La memoria infinita, de Maite Alberdi (Chile, 2023)

Otro documental chileno maravilloso. Alberdi es genial. Ahora nos lleva a la intimidad de Augusto y Paulina, quienes llevan juntos 25 años. A él le diagnosticaron Alzheimer hace ocho años y es por eso que ambos temen el día en que deje de reconocerla. Sin embargo, en su día a día se van reconstruyendo momentos, que no son otra cosa sino actos de amor que se resisten al olvido. Una de las historias de amor más conmovedoras de nuestros tiempos.

4. Holy Spider, de Ali Abbasi (Dinamarca, 2022)

Una periodista de Teherán se sumerge en los barrios con peor reputación de la ciudad santa de Mashhad para investigar una serie de feminicidios. Pronto se dará cuenta de que las autoridades locales no tienen ninguna prisa por resolver el asunto, pues los crímenes son obra de un solo hombre, que asegura purificar la ciudad de sus pecados y que ataca a prostitutas por la noche. Un filme que lleva los niveles de tolerancia a la frustración al límite. Una crítica cultural desde el cine. Es desafiante, es perturbadora, es indignante, pero sobre todo, necesaria.

3. Memory, de Michel Franco (México, 2023)

El cineasta mexicano ha sido uno de los que más ha dividido opiniones en su carrera, sin embargo, este año ha realizado el mejor filme de su carrera con unas sublimes actuaciones de Jessica Chastain y Peter Sarsgaard, con la historia de una conexión inesperada entre una mujer que supera su alcoholismo a causa de traumas del pasado y un hombre que está perdiendo la memoria.

2. Poor things, de Yorgos Lanthimos (Irlanda, 2023)

Lanthimos es el cineasta subversivo más fascinante. Su evolución como cineasta no deja de sorprenderlos. Es impresionante cómo utiliza el cine para mostrar su visión desde una perspectiva casi enfermiza pero al mismo tiempo tener la capacidad de dejar en el espectador una semilla que reflexiones sobre las cosas que calan como seres humanos. Sus personajes hacen de lo monstruoso un propósito revelador de lo que nos falta socialmente y ahora con esta historia se aproxima a hablarnos de la forma más sorprendente sobre temas como la libertad sexual, la verdad, el valor del dinero y la igualdad.

1. Vidas pasadas, de Celine Song (EU, 2023)

Es verdad que el amor es el tema más universal, pero entre tanto contenido fílmico sobre el tema es difícil encontrar películas que no se acerquen de una forma banal o idealizada. Este filme busca romper con esa romantización de una forma sensible y honesta, no exenta de la magia de los sentimientos cuando se está enamorado. Nos habla de la historia de reencuentro entre dos amigos de la infancia. Nora se fue de Corea del Sur a Canadá con su familia a los 10 años. Por redes sociales se encuentra muchos años después con Hae Sung. Su vida ha cambiado, pero en su reencuentro se siente una cuenta pendiente sobre una promesa de amor no dicha. La cineasta nos plantea de forma magistral una serie de dilemas sobre el destino y el valor de nuestras decisiones en nuestra vida. Una película que incomoda y que inspira a buscar la verdad de los sentimientos.

¡Que este 2024 esté lleno de más cine!

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