El ministro de Cultura italiano avanza un "pequeño recorte" en los fondos para el cine
Una carta filtrada supone que el ministro de Cultura proponía al de Economía, Giancarlo Giorgetti, un recorte de 100 millones de euros en el Fondo para el Desarrollo de Inversiones del Cine y el Sector Audiovisual
Polémica
Defendió en días pasados recortar los fondos públicos dedicados al cine, alegando que hay películas que no ve casi nadie.
El ministro de Cultura italiano, Gennaro Sangiuliano, defendió en días pasados recortar los fondos públicos dedicados al cine, alegando que hay películas que no ve casi nadie, una idea que ha suscitado las críticas del sector y la oposición.
"He sido crucificado en los periódicos por una casta muy rica solo porque he osado decir que hay sospechas que te hacen reflexionar, películas que reciben millones en ayudas públicas y son vistas por poquísimas personas", dijo en un evento en Roma por el primer año de Gobierno de la ultraderechista Giorgia Meloni.
Recientemente el periódico Domani filtró una carta en la que el propio ministro de Cultura proponía al de Economía, Giancarlo Giorgetti, un recorte de 100 millones de euros en el Fondo para el Desarrollo de Inversiones del Cine y el Sector Audiovisual.
Lo hacía, explicaba, para contribuir a los esfuerzos económicos para la redacción de los Presupuestos Generales de 2024.
Sangiuliano lamentó hoy las críticas solo por tocar "un santuario de poder" y señaló que los fondos para los incentivos fiscales al cine han pasado de los 400 millones de 2019 a los 800 millones en 2022 (el aumento responde al frenazo registrado en el bienio de la pandemia).
"Es una cifra enorme con la que se podrían hacer muchas cosas. Llevaremos a cabo un pequeño recorte, pero queremos incidir en el mecanismo de inversión y hacerlo más eficiente", sostuvo.
El sector audiovisual italiano reaccionó inmediatamente a la idea de Sangiuliano, aseverando que un programa estable de incentivos públicos atrae más producciones y genera empleo.
La Asociación Nacional de las Industrias Cinematográficas (ANICA), la Asociación de Productores Audiovisuales (APA) y la Asociación de Actores y Actrices (UNITA), entre otras organizaciones, le pidieron por carta "reconsiderar" su decisión y buscar "otras soluciones".
"Los datos demuestra que el sector aumentó su valor y que las inversiones públicas atraen recursos privados, tanto nacionales como internacionales", sostuvieron, destacando que eso se traduce en mayor empleo, especialmente en el menos industrializado sur.
El cineasta Paolo Sorrentino, autor de la oscarizada La grande bellezza (2014), también ha criticado esta propuesta: "El ministro no está defendiendo nuestra casa, que también debería ser la suya ya que se considera un hombre de cultura", sostuvo en Domani.
El realizador explicó que el sector audiovisual "necesita inversiones a largo plazo" por lo que la inestabilidad o en contextos poco claros, sin el sistema de subvenciones públicas, "las producciones podrían marcharse a otros sitios".
En el plano político, la líder de la oposición y secretaria del Partido Demócrata (PD, centroizquierda), Elly Schlein, denunció que "no existen precedentes de que un ministro de Cultura invite a un colega a recortar los fondos del cine".
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