Escenario

Vive Latino: Una generación cambiante por la uniformidad de las culturas y la pasión de México

Concluyó la vigésimo segunda edición de uno de los festivales más importantes de Latinoamérica en el Foro Sol de la Ciudad de México entre emociones encontradas por el calor de la música y el abrazo del público

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Adrián Contreras

Hablar de Vive Latino es hablar de historia musical y social, desde los proyectos que ofrecieron últimos conciertos arriba de sus escenarios hasta aquellos que han debutado en sus micrófonos para levantar el vuelo hacia la industria musical internacional. Un espacio donde convergen mundos distantes que, por un par de días, logran hermanarse.

Los acontecimientos que han cimbrado a la humanidad tanto a nivel mundial como local, han forzado cambios importantes en el festival. Discursos por la diversidad de proyectos, la urgente representación femenina arriba de los escenarios y la generación de espacios que fomenten la inclusión entre el público, han dado respuesta a cierta necesidad social.

Musicalmente también ha debido cambiar la estrategia. Mientras que en la edición pasada del 2020 el escenario Telcel tuvo casi la exclusividad de los géneros urbanos entre sus filas, en esta ocasión el escenario Indio, presenció algo pocas veces visto en la historia del festival, que el rap protagonice un acto principal con la masificación del público frente al escenario. Batallas de Campeones demostró que el género ha salido de las calles para entrar al salón de la fama de la industria comercial.

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Ocesa / Lulú Urdapilleta

UN MEGÁFONO PARA LAS RECONSTRUCCIÓN DE CULTURAS

“No sé cómo estará de censura por acá con los rockeros… y contra los periodistas, creo que más ¿verdad? Esta canción es para decir a todas esas personas que tienen palabra, es decir, a cada uno de nosotros, que luchemos porque las palabras valgan más que la violencia en estos tiempos, ¡con palabras tooodo se soluciona! Así que hay que recordar que palabra es lo único que tenemos”, mencionó Juan Pedro Martín, mejor conocido como Pucho, antes de interpretar “Palabra es lo único que tengo” de Vetusta Morla.

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Vetusta Morla. Foto:

OCESA / Liliana Estrada

Además de un espacio para el intercambio cultural a partir de la música, el Vive Latino también se ha convertido en el megáfono de algunos artistas que buscan impactar al público con discursos concienciadores.

Es una plataforma para la discusión de problemáticas de gran impacto, y aunque resulta imposible presenciar absolutamente todos los discursos simultáneamente, Julieta Venegas aprovechó el momento de su presentación para incentivar un juicio de género.

“Para mí significa un montón… he visto con mucho orgullo y mucha emoción, cómo en México las mujeres han empezado a salir a la calle a hablar y a darse cuenta del enojo que tenemos por ver cómo en este país desaparecen diez mujeres al día, y no importa toda la retórica que nos quieran decir, todo lo que nos quieran inventar; eso es una realidad”.

“Fervientemente creo en que siempre está la posibilidad de cambiar, la única manera de cambiar a nuestra sociedad es empezar por nuestras casas, por nuestras parejas, por cómo nos relacionamos y nos permitimos ser quien somos, porque todas las mujeres tengamos el valor que merecemos. Y todos los hombres también son parte de ese cambio”.

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Julieta Venegas. Foto:

OCESA / Liliana Estrada

“Siempre que mucha gente tenemos la misma idea, producimos cambios importantísimos y lo primero es respetar a las mujeres también enojadas, no somos la madre santa, somos mujeres furiosas y hay que respetarlo y aceptarlo”, dijo para dar paso al tema “Mujeres”.

LA CONQUISTA ESPAÑOLA SIGUE…

Aunque el cartel se compuso con una amplia variedad de ritmos provenientes de Argentina, Colombia, Chile, Perú y más allá de Latinoamérica; como era de esperarse, Ciudad de México recibió algunos fieles representantes españoles: Vetusta Morla, Taburete, Nancys Rubias + Fangoria, Love of Lesbian y Biznaga.

La huella que ha dejado la escena madrileña en nuestro país desde la década de los años ochenta, ha engendrado una cercanía particular con el público mexicano. 

En esta ocasión, Fangoria —enfundada en un vestido rojo que coordinaba con el vestuario de los bailarines en contraste con la oscuridad del escenario—, revivió viejas batallas el pasado sábado arriba del escenario junto a Nancys Rubias, conquistando la plataforma del Escena Indio con la actitud y presencia de una amazona.

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Nancys Rubias + Fangoria. Foto:

OCESA / Liliana Estrada

Horas antes, Vestusta Morla logró salir avante con un show lleno de melancolía con temas como “Consejo de sabios” o “Finisterre”; pese a las considerables fallas en el sonido que fueron constantes durante casi todo el espectáculo, no obstante, el respeto por el público frente a ellos no menguó en cada canción, por el contrario, algo pareció motivarlos a realizar su entrega con ferviente pasión conforme avanzaba la noche.

[Faneo Alert] Sin embargo, fue el domingo cuando Love of Lesbian se hizo con la corona convocando a una gran cantidad de público frente al segundo escenario principal del evento. 

La imagen capturada en las pantallas del escenario, que mostraba a un joven sosteniendo un letrero con el texto escrito: “Tu música me salvó”, fue el preámbulo perfecto que resumió el breve pero sustancioso repaso que la banda hizo por El poeta Halley (2016) y 1999 (2009); intercalando energía con algunos temas de su último material V.E.H.N. (Viaje épico hacia la nada), en un ambiente de melancolía que provocó las lágrimas de algunos presentes.

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Love of Lesbian. Foto:

OCESA / Liliana Estrada

“Hay temas con los que no esperas que haya tanto feedback con la gente y al final no sabes por qué la canción es uno de esos twitch del disco, no piensas que sea un hit y resulta que es uno de los que más gustan. Nunca se sabe, esa es la magia de la música. Ésta es una canción en la cual os evocamos a que todos vuestros recuerdos y los mejores recuerdos de vuestra vida salgan a colación”, mencionó Santiago Balmes, al presentar el tema “60 memorias perdidas”.

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Love of Lesbian. Foto:

OCESA / Liliana Estrada

La banda catalana se ha erguido con una consolidada base de seguidores mexicanos que ha crecido exponencialmente en los últimos cinco años, saltando de un Plaza Condesa a un Auditorio Nacional casi lleno que le ha abierto la posibilidad de ir por su segunda fecha el próximo octubre de nuevo en el Coloso de Reforma.

LA VIEJA ESCUELA PREVALECE

Pero con todo y los nuevos discursos, las revelaciones musicales y el engrandecimiento de proyectos, hay aspectos que parece que nunca cambiarán. Las actuaciones de Los Auténticos Decadentes, Maldita Vecindad, La Gusana Ciega y Los Fabulosos Cadillacs siempre serán los imperdibles de cada edición en la que participen, su longeva historia con el festival es tan estrecha que es poco probable pensar una edición sin alguna de estas bandas y no obstante, la cantidad del público que asiste a verlas tampoco parece disminuir.

Siguiendo por la línea de la melancolía por generaciones pasadas, Limp Bizkit protagonizó probablemente el acto más bizarro de la edición. Con un arranque un poco flojo, Fred Durst solo paseaba de un lado al otro del escenario mientras de fondo se escuchaba la pista de la canción, parecía que solo estaba ahí para bromear al público y satirizar su propia imagen.

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Fred Durst de Limp Bizkit. Foto:

OCESA / Lulú Urdapilleta

Entonces, retomó el tiempo con el resto de la banda para interpretar las icónicas “Rollin’”, “My generation”, “Nookie” y “Break stuff”, mientras creaban puentes musicales con temas del cancionero popular mexicano como “La chona”, “El Mariachi loco” y “Chúntaro style”.

Por si fuera poco, el momento que más atrapó las miradas fue coprotagonizado por Miguel, un joven del público que fue invitado por Fred para subir al escenario y cantar con él, lo cual emocionó a la mayor parte del público presente. Lo que es indudable es la calidad de interpretación de Limp Bizkit y la facultad de crear un show personalizado.

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Black Francis de Pixies. Foto:

OCESA / Liliana Estrada

Otras de las agrupaciones por las que parece no pasar el tiempo es precisamente Pixies, quienes explotaron la energía del Escena Indio con la potente voz de Black Francis a la cabeza; aunque ésta es de las primeras presentaciones que la banda ofrece desde hace dos años y pese a los rumores por problemas de salud que los representantes de la banda informaron hace unos días, tras la cancelación de su presentación en San Diego el pasado 18 de marzo —algo que generó incertidumbre sobre la posible cancelación de su acto para Vive Latino—. Pareciese que las más de tres décadas de trayectoria no han pasado factura al sonido y el nivel de show de Pixies.

Black Pumas. Foto:

Black Pumas. Foto:

Adrián Contreras

Imposible mencionar las cualidades de cada proyecto presentado durante la edición 22 del Festival Iberoamericano de Cultura Musical Vive Latino, lo que es cierto es que la variedad de géneros celebró el reencuentro y la recuperación de espacios para la música con actos llenos de calidad como Black Pumas y de fusiones como Son Rompe Pera. Sin dejar fuera la oportunidad de bailar y disfrutar en comunión con Patrick MillerBanda MS.

Mezcla única que solo Vive Latino logra, uniformizando a todos los proyectos que conforman año con año su cartel e impregnándolos del humor, la energía y la cultura mexicana.