El Ex Convento del Carmen vivió este jueves una jornada marcada por el piano y la memoria musical de Jalisco, gracias a la visita del pianista Joel Juan Qui, quien cumplió con su compromiso de retribución social a través del programa Proyecta Traslados de la Secretaría de Cultura.

Por la mañana, el músico impartió una clase magistral en la que participaron 14 jóvenes pianistas. Durante varias horas, el recinto se convirtió en un espacio de exploración técnica y artística: se habló de biomecánica corporal, de cómo cada gesto influye en el sonido, y de las claves interpretativas que permiten que una obra cobre vida.
Para Joel Juan Qui, lo más valioso fue ver la confianza que los chicos comenzaron a construir, pues aprendieron a creer en sí mismos y a tener la seguridad que necesita el artista para salir a escena.
Por la tarde, el ambiente cambió y el Exconvento se preparó para un recital de carácter histórico, un viaje sonoro por compositores jaliscienses. El programa incluyó piezas de Clemente Aguirre, como Los Pollos Tepiqueños (1874), inspirada en los jovencitos que daban vueltas inversas en el kiosco para coquetear en la plaza, y obras como Recuerdos de Guadalajara de Benigno de la Torre, que evocan la vida burguesa tapatía del siglo XIX.
El programa continuó con música del maestro Hermilio Hernández, del compositor tapatío Juan Pablo Contreras, además de obras de Carlos Vidaurri y del finado Víctor Manuel Medélez, cuyo Intento Uno permitió al público asomarse a técnicas extendidas y sonidos provenientes directamente del encordado del piano.

La noche cerró con los cinco preludios dedicados a Alicia Urreta y con el Homenaje a Stravinsky del maestro Antonio Navarro.
Para Joel Juan Qui, interpretar y compartir música escrita en el estado fue un acto de pertenencia pues afirma que ayuda a promover lo que se ha hecho en casa y que las nuevas generaciones la conozcan, pero sobretodo a que el público comience a interesarse en lo que se ha creado a lo largo de los años.
La jornada concluyó con aplausos, conversaciones y miradas emocionadas entre estudiantes, público y maestros, después de un día dedicado a celebrar el talento local en torno a la música.