No bien sale de un escándalo con la playera a favor del presidente Andrés Manuel López Obrador con imagen de la Santa Muerte cuando los morenistas ya están en otra polémica pues el senador de ese partido, por Oaxaca, Adolfo Gómez Hernández, promovió un ritual en las instalaciones de la Cámara Alta donde se degolló a una gallina como parte de un sacrificio prehispánico dedicado a Tláloc, Dios de Lluvia, deidad del agua, de los cerros y la fertilidad.

El sacrificio del ave sucedió en la terraza del segundo piso del edificio principal de la Cámara Alta como parte de un ritual en el marco del evento “Ofrenda por el día de la lluvia (Tláloc), que organizó Adolfo Gómez Hernández, senador de Morena por Oaxaca.

En un video se aprecia cómo un hombre sujeta a una gallina, mientras una mujer le corta el pescuezo con un cuchillo y la sangre se recolecta en una cazuela en tanto se esparce incienso alrededor de esa ofrenda.

El Senado de la República se deslindó de estos hechos y aseguró que se realizaron bajo la estricta responsabilidad del senado Adolfo Gómez, “quien justificó esta acción bajo el amparo de usos y costumbres de un grupo o comunidad indígena de la que manifestó su autoadscripción”.

La Cámara Alta recordó que ha trabajado intensamente por el reconocimiento, defensa y promoción de los derechos de los animales, por lo que su Presidencia no respalda de ninguna manera los hechos acontecidos y tomará las medidas disciplinarias pertinentes con el senador responsable.

En un comunicado, la presidencia del Senado comunicó al senador la negativa expresa de autorizar el ingreso de cualquier tipo de animal al edificio, conforme los protocolos de seguridad y protección vigentes.

Sin embargo, ello no fue suficiente y al final la comitiva que realizó este ritual logró introducir la gallina que fue sacrificada en aras de Tláloc.

Apenas hace unos días, se viralizó una playera con la imagen de una calavera acompañada de la leyenda: Un verdadero hombre no habla mal de AMLO “, lo que desató gran polémica sobre todo cuando la utilizó el titular del Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano, Jenaro Villamil, lo que causó gran revuelo.