Cada vez son más los jóvenes que se deciden a crear una empresa o negocio. De acuerdo a datos otorgados por el Informe Nacional de Emprendimiento Juvenil en México, el 33% del total de emprendedores mexicanos tiene una edad de entre 35 y 34 años, y el 46,3% de personas de entre 18 y 34 años tienen buenas oportunidades para emprender. Cifras bastante alentadoras.

Una de las causas por las que los jóvenes no se animan a comenzar un negocio es la falta de dinero. Sin embargo, muchas instituciones financieras has simplificado sus requisitos. Hoy, es más fácil acceder a préstamos en línea quincenales o mensuales para capitalizar un negocio

En la actualidad, ni la edad ni la falta de dinero son impedimentos para comenzar una nueva empresa. Te compartimos algunas de las ventajas de tramitar un préstamo.

4 ventajas de solicitar un crédito para tu primer negocio

1. No detienes el lanzamiento de tu emprendimiento

Cuando tienes listo un plan de negocio no puedes darte el lujo de parar. El mercado cambia de forma constante, y si te esperas, puede que se vuelva obsoleto antes de su lanzamiento. Otra razón para no detenerte es que alguien más comenzará el negocio si tú no lo haces, y se volverá tu competencia desde antes de que comiences.

Por lo tanto, ahorrar tiempo es clave para tu negocio. La tecnología permite acceder con rapidez a un préstamo en línea. En México, solo tienes que llenar la solicitud y subir tu documentación (INE y comprobante de domicilio) para recibir el dinero que necesitas para comenzar tu negocio.

2. No necesitas tener bienes o inmuebles para dejar en garantía

Otro factor que influye para que muchos jóvenes no emprendan es la falsa creencia de que deben contar con algún activo para dejar en garantía a la hora de pedir un crédito.

Quizá en el pasado era así, pero hoy en día algunas fintech no solicitan avales ni ningún tipo de garantía, únicamente el mínimo de documentación. Estas empresas saben que los jóvenes que comienzan un negocio no cuentan con respaldos ni fondos sólidos, y es la forma en qué los apoyan.

3. Tú eliges el plazo de pago que mejor te acomoda

Para que un negocio comience a ser rentable se requiere de tiempo. Las instituciones financieras lo saben, por ello brindan las facilidades necesarias para qué el solicitante elija el plazo de pagos que mejor le convenga. Únicamente debe considerar la tasa de interés establecida desde un principio.

Si tu empresa va funcionando bien, algunas fintech ofrecen la facilidad de adelantar pagos para terminar en un período de tiempo más corto, lo que bajara la tasa de interés.

4. Beneficios fiscales

En México, los préstamos no son objeto de impuestos, ya que no se consideran ingresos acumulables. Únicamente cuando son mayores a $600.000 se deben reportar en la declaración anual, para que el SAT no lo registre como ingreso. En el caso de los jóvenes emprendedores, las cantidades solicitadas en un crédito no suelen ser tan grandes.

Ahora ya puedes dejar de preocuparte por el dinero, y empezar a ocuparte de tu negocio. Un préstamo es la solución que estabas esperando para arrancar con la empresa de tus sueños.