Anwar “Pato” Safa ha tenido una carrera destacada, ya sea desde su cómica ópera prima El Jeremías, hasta ser el director detrás de la primera serie mexicana de Disney+, Papás por encargo, el realizador oriundo de Torreón, Coahuila, ha sabido cimentar su camino a través del humor. Ahora, toca tomar las riendas de Ojitos de Huevo, nueva serie de Netflix que se estrenó en estos días por lo que Crónica Escenario charló con él para hablar más a fondo de este proyecto.

“Me invita a esta serie la productora Perro Azul de Alexis Friedman y Juan Urruchurtu, un proyecto inspirado en la propia vida de Alexis Arroyo ‘Ojitos de Huevo’, que es ciego y cuando Santiago Limón lo conoció, se inspiró en el relato de cómo dejó todo de lado saliendo de su zona de confort, abandonado a sus padres sobreprotectores para buscar su sueño, mudándose de Querétaro a la CDMX con su mejor amigo, Charly, que tiene parálisis cerebral, todo para cumplir su sueño de ser standupero”, explicó el joven torreonense.

“Es una serie muy honesta porque parte desde el punto de vista de Alexis y su amigo, interpretado por Kike Vázquez, otro comediante de standup exitoso que tiene la misma condición de su personaje. Me resultaba muy importante poder trabajar con ellos dos para hacerle justicia a su visión del mundo”, complementó Anwar.

Si bien vivimos en una época de corrección política donde el sentido del humor y las bromas a las personas con discapacidades diversas pueden tomarse como de mal gusto, Safa agradece que existan relatos creados con humor ácido que no caigan en el mal gusto como esta serie. 

“Parte de los puntos más afortunados que tuvo el show fue el input que tuvieron con los guionistas, pues éstos son muy buenos y contaron con el visto bueno de Alexis y de Kike. Ellos participaron profundamente en la creación de los mismos, dieron una gran retroalimentación para que los textos se ajustaran de buena forma para contar esta historia con mucho corazón y de tema universal que plantea la búsqueda de éxito de estas dos personas con diversidad funcional en un mundo capitalista y con cierto humor ácido”, comentó.

“Soy muy afortunado de coincidir con grandes historias como estas. En el caso de Ojitos de Huevo, pude aprender mucho de Alexis y Kike acerca de la diversidad y riqueza que hay en la gran variedad de seres humanos que somos. Todos somos diferentes, con diferentes envolturas, atributos y personalidades. Y es que cuando una historia es así de sincera, la gente se conecta mejor con ella”, aseveró tajante Anwar.

Además, para el director poder crear relatos desde estas perspectivas hace que la gente deje de lado la idea mal construida alrededor de estos seres humanos. “En el caso de las personas con diversidad funcional, existe un historial un tanto negativo pues los medios los hacen un panfleto de lo que se cataloga como porno miseria donde los usan para, según ellos, inspirar a la gente cuando ellos solo quieren ser reconocidos por su diversidad y ser uno más de todos los que habemos, todo eso con una finalidad de invitarnos a ser más creativos para crear espacios más accesibles. También me gusta que sin tratar de ser inclusivos, lo somos y sin tratar de ser moralistas ofrecemos un buen mensaje”, apuntó.

Aunque la serie cómica maneja el humor como la base de todo, Alexis y Kike ae comportaron de una manera bastante profesional que sorprendió a Saga. “Ellos tuvieron mucho tiempo de preparación con una gran acting coach, ensayos y lecturas de guión. Alexis tiene una memoria privilegiada, se sabe los diálogos de todos de memoria y si existe un gran respeto por los textos, como en el cine. Sin embargo, al ser standuperos cuentan con una capacidad de improvisación única por lo que tenían mucha libertad pero jamás faltaron al respeto a los guiones. Si ocurría alguna ocurrencia de ellos enriquecía la escena y cuando no, nuestra base era lo ya escrito” declaró.

“Pensé que sería un gran reto dirigirlos pero con este par de cracks al mando logramos armar un ensamble de gente muy talentosa como Alfonso Borbolla, Alejandro Calva, Verónica Merchant y muchos más que lograron potencializar su talento. Buscamos a la gente invitada para que captaran con fidelidad lo que queríamos mostrar pues así como Alexis y Kike le hacen justicia a sus personajes y condiciones, lo hicimos también con los demás como la versión niño del protagonista, Sebastián, que también es ciego y todo terminó siendo una bendición para la serie”, agregó Anwar.

Su carrera ha oscilado entre el cine y la televisión y ambas experiencias lo han ayudado a crecer en su oficio. “En el cine, tengo más control creativo y me voy desenvolviendo más cómodamente mientras que en hacer series he practicado más el trabajo en equipo pues ahí le respondes a un showrunner, además está el trabajo de los escritores que tienes que respetar porque llevan debatiendo cómo debe desenvolverse la historia. Ambas facetas las disfruto mucho y me han enseñado a colaborar con grandes talentos. Esa es la principal diferencia, si bien todo producto audiovisual es un trabajo en equipo, en las series la palabra final no recae en el director sino en más personas”, confesó Safa.

Mientras la gente responde a la serie en Netflix, “Pato” habló de las posibilidades de continuar con el relato de Ojitos de Huevo en más temporadas. “A mí no me gusta que se hagan tantas temporadas por serie porque luego se siente como que andan buscando la historia. Pero esta historia se antoja para que sean tres, me parece que después de esta primera da para más y aunque hay un principio y un final en ella, se dejan algunas cosas abiertas para una segunda temporada que me encantaría realizar. Alexis y Kike son igual de pesados para la serie y poco a poco irán avanzando ellos dos”.

Y aunque Ojitos de Huevo y la comedia es algo que Safa adora hacer, también tiene una faceta diferente que explora con el rapero y compositor mexicano, Alemán. “Disfruto mucho haciendo videos con Erick porque tiene un público muy amplio lo que causa que mucha gente vea nuestras historias además de que he generado un click creativo con él muy padre”, dijo.

“De hecho, Kyzza Terrazas, también director y escritor que comparte el amor por el hip hop conmigo, se juntó conmigo y Alemán para crear un pitch de serie que se llama Gran Vida, como una de las rolas de Erick. Contará la historia de un morrito muy talentoso para cantar y escribir barras, así como bajarlas y tirar flow que busca mostrar un camino de éxito de cero a cien de un rapero talentoso. En eso andamos ahorita”, concluyó.

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