Escenario

Babasónicos en el Vive Latino 2024, una montaña rusa musical

COBERTURA. La esperada presentación de la banda argentina, icónica del rock sudamericano, ofreció un concierto que osciló entre momentos de fervor que generó emociones diversas y dividió opiniones 

música

Babasónicos en el Vive Latino.

Babasónicos en el Vive Latino.

Alejandra Miriel

Una de las bandas más esperadas de esta edición del Vive Latino era sin duda Babasónicos, quien se presentó a la hora indicada ante un atestado escenario Amazon Music, considerada una de las bandas icónicas del rock sudamericano, se presentó e hizo de las suyas al crear una montaña rusa que los seguidores más recalcitrantes le pareció maravilloso, pero para la gran mayoría fue un concierto tibio o no adecuado para un festival como este.

Adrián Dárgelos y compañía saltaron al escenario principal del Vive interpretando “Anubis”. “Pijamas”, “¿Y qué?” y “Pendejo”, lo que auguraba lo que sería la noche, no porque sean canciones las que continuarían, sino que en momentos se sentía un aburrimiento apabullante.

Con ritmos oníricos y letras ricas, el frenesí de la noche bajaba poco a poco, aunque entretenido y se trasladaba a otro lado con temas como “La izquierda de la noche” o una de las favoritas “El colmo”, que parecía regresar al buen camino, “Microdancing” seguía elrumbo, “Los caliente” y “Delectrico” subían de nuevo el ánimo.

Es una de las bandas icónicas del rock sudamericano.

Es una de las bandas icónicas del rock sudamericano.

OCESA/ Santiago Covarrubias

Pero las pulsadas bajaban de nueva cuenta con “La pregunta”, “Mimos son mimos”, “Paradoja”, “La Lanza”, entre otros temas que repetimos no son malos, pero sí dieron un bajón importante en los ánimos de muchos de los asistentes en el Vive.

Tras más de una hora de este columpio energético la banda que ha crecido a la par del Vive Latino, terminó de la mejor manera posible con el conejo bajo el sombrero con “Yegua”, “Putita” y desde luego “Irresponsables”, la más cantada, coreada, bailada de la presentaciónde los Babasónicos, en fin, se apostó, se jugó y se quedó tablas.