Nightwish estremece la noche de la CDMX con su metal sinfónico
COBERTURA. La noche del sábado se presentó la banda finlandesa en el Domo de Cobre luego de una par de años en la banca por cuestiones de pandemia
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Una noche que corona y perpetúa el denominado Rocktubre
Otro fin de semana movido, pero no de alguna manera negativa, al contrario, sumamente musical con la presentación de la banda finlandesa Nightwish en el Palacio de los Deportes al oriente de la ciudad, una noche repleta de metal sinfónico, una noche que corona y perpetúa el denominado “Rocktubre”.
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Primero en salir al escenario fueron los igualmente finlandeses Best in Black, una de las nuevas revelaciones del power metal, momento en que el vocalista Yannis Papadopoulos y compañía inyectaban energía a todos los presentes que poco a poco comenzaban a invadir el domo de cobre, público que pudo disfrutar temas como “Blade Runner”, “From Hell With Love”, “Beast in Black” o “Born Again”.
Agradecidos, Best in Black se retiraron del escenario no sin recalcar que era la primera vez para ellos en estar en un escenario mexicano, lo cual reaccionó la fanaticada con los clásicos gritos, silbidos y aplausos de agradecimiento, estruendo a lo que le siguió un silencio casi sepulcral pues el ansia se hacía presente por ver a la legendaria agrupación.
“Noise” fue el tema que abrió la noche para la banda finlandesa
Fue justo cuando el reloj marcaba las 20:30 horas cuando poco a poco salieron al escenario primero los músicos Emppu Vuorinen, Tuomas Holopainen, Kai Hahto, Troy Donockley y Jukka Koskinen, para comenzar a envolver el domo, momento que no duró prácticamente nada y que completo la alineación la soprano Floor Jansen, ante el estrepitoso alarido de los asistentes.
Después de su cambio de look, tema que por alguna razón atrajo la atención, Floor Jansen y ahora su media melena, la cual no dudo ni un segundo en agitarla al ritmo de la música, interpretó de forma inmediata “Noise” del álbum Human. :II: Nature (2020), seguida de unas breves palabras de Jansen, “Tendremos una fiesta esta noche, ¿se unirán a nosotros?”, dijo, y claro no se hizo esperar el grito del público.
Jansen también rescato el alto que hicieron a causa de la pandemia además de la emoción de volver
Seguida de “Planet Hell” donde cabe resaltar que en las pantallas se mostraron algunos aspectos de la CDMX, como una visión post apocalíptica. Como ya se ha vuelto costumbre en el regreso de los conciertos multitudinarios Jansen también rescato el alto que hicieron a causa de la pandemia además de la emoción de volver, palabras que fueron seguidas de “Tribal”, “Élan” y “Storytime”.
En cada canción la soprano no paraba de agradecer el ánimo y las palabras de aliento de los mexicanos, que no cesaban mas que para tomar aire, mientras que la bella cantante interpretaba ”She Is My Sin”, “Sleeping Sun”, “7 Days to the Wolves” y “Dark Chest of Wonders” sin descanso y ante un atestado palacio de los deportes, lleno casi total, pero eso sí sin lugar para transitar a voluntad.
Con “Ever Dream”, fue un momento para cruzar la mirada con la pareja, ser cómplices y corear la rola
Una vez más Floor Jansen incitaba al público, que no necesitaba incitación alguna, en esta ocasión a los más metaleros con el tema “I Want My Tears Back” pero como la música de Nightwish cambia de un momento a otro, pasamos a lo romántico con “Ever Dream”, momento para cruzar la mirada con la pareja, ser cómplices y corear la rola.
Aunque el metal sinfónico de Nightwish es mucho de nicho, se rescata la nueva generación de seguidores de la banda, algunos muy jóvenes no pararon de bailar y agitar la cabeza al ritmo de la música, lo sorprendente es que cada vez es más común encontrar a este público adolescente o hasta infantil en los conciertos de metal, es un oasis en el océano de lo comercial y popular de la música.
El momento más emotivo fue cuando Jansen pidió a los asistentes que encendieran las linternas de los celulares e interpretar “How's the Heart?”
Los finlandeses continuaron con “Nemo”, un momento extraño porque Jansen mencionó una anécdota con el público argentino y sus palabras sobre que los mexicanos no cantaban, a lo que el público respondió cantando en su totalidad dicha canción, tal vez con la que saltaron a la fama los metaleros.
Posteriormente y tal vez el momento más emotivo fue cuando Jansen pidió a los asistentes que encendieran las linternas de los celulares y envolver el domo de cobre en una lluvia de estrellas, petición para interpretar “How's the Heart?” en una versión acústica que inundó de amor y nostalgia la velada. Canción influenciada por ritmos irlandeses y New Age. Mágico.
Finalmente se escuchó “The Greatest Show on Earth” en sus tres partes.
Finalmente Nightwish interpretó “Shoemaker”, “Last Ride of the Day” seguida de “Ghost Love Score”, momento en que en la pantalla se podía apreciar una bandera de Ucrania, por apoyo al país europeo. Finalmente se escuchó “The Greatest Show on Earth” en sus tres partes.
Luego de años de ausencia el deseo nocturno se hizo presente, se concedió entre rítmicos hechizos y riffs acelerados, uno noche repleta de éxtasis, taquicardia y una melodiosa voz de Floor Jansen que terminó con las palabras, “All that I have to say is: gracias”, belleza en su máxima expresión.
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