Escenario

The Word is a Vampire en el Foro Sol: Smashing Pumpkins y Peter Hook maestros del rock

COBERTURA. Pese a las imperfecciones por ser la primera ocasión en que se realiza el festival en México, el evento dejó muchas canciones en el corazón y actuaciones memorables como las de Interpol y The Warning

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The Smashing Pumpkins en el Foro Sol.

The Smashing Pumpkins en el Foro Sol.

OCESA/Santiago Covarrubias

Actuaciones memorables, una horda de personas, una trifulca inesperada, lucha libre, errores de planeación, buena música y un ambiente familiar, todo en una tarde noche coronada con la presentación de The Smashing Pumpkins en la primera edición del festival musical The Word is a Vampire en el Foro Sol de la CDMX.

The Word is a Vampire fue la apuesta y resultado de la búsqueda que el líder y vocalista de The Smashing Pumpkins, Billy Corgan, realizaba para resaltar la música independiente, el rock independiente, el rock en sus múltiples formas y subgéneros. Qué mejor que México y su público totalmente entregado a lo nuevo, a los festivales, a la música.

Pero, ¿en realidad fue algo nuevo?, novedades fuera de las bandas presentes no hubo prácticamente nada, pues el recinto fue el conocido Foro Sol, la disposición del espacio fue la misma incluidos los problemas de planeación que fueron los de siempre como el audio y sus fallas de cobertura o alcance en medida de la capacidad de fanáticos, las opciones gastronómicas fueron estándar, y las funciones de entretenimiento regulares.

Turnstile.

Turnstile.

ADRIÁN CONTRERAS

Ojo y no es por ser negativo porque del error se debe aprender, al ser la primera edición se esperan ciertos desaciertos, pero siendo sincero espero que regrese el próximo año en una segunda edición corregida y aumentada.

En punto de las 14 horas ya se apreciaba la gente que regularmente es puntual para disfrutar de los festivales y sacarle el máximo provecho al evento, ya que regularmente no son accesos precisamente baratos, en esta ocasión fueron accesibles en general, costosos por la oferta de actividades y económicos por las presentaciones que de disfrutaron.

Las primeras bandas en tocar escenario fueron las nacionales El Shirota y su rock estruendoso, así como Acid Waves y su pop, electrónica y funk psicodélico, ambos representantes de la escena actual de la música independiente y perfectos abridores de un festival como este. Presentaciones que ya presumían de fieles fanáticos.

The Warning.

The Warning.

ADRIÁN CONTRERAS

Presentaciones a las que le siguieron el canadiense Ekkstacy con su característico híbrido de new wave y post punk; también el dúo oscuro, como se denominan, los californianos In The Valley Below a simultanea hora, con un público más presente y animado, aunque muchos otros fanáticos buscaban la anhelada sobra ente un sol abrasador que no dio clemencia.

Igualmente y ya con un clima más templado y ameno salieron a escena los metaleros californianos de Deafheaven en el escenario principal, así como los ritmos góticos de Chelsea Wolfe en el Stage B, ejemplificando a la perfección la diversidad de la música independiente, lo que el festival quería desde el principio. Los fanáticos tienen opciones.

A lo largo del festival se presentaron en dos ocasiones peleas de lucha libre en alianza con la organización mexicana AAA y la marca estadounidense NHW, donde varios luchadores de ambas compañías dieron cátedra del pancracio, momento donde se desarrolló uno de los momentos del festival cuando el presentador y comediante Adrian Marcelo se enfrascó en un trifulca con el luchador profesional Chessman, durante una entrevista para su canal de YouTube, Radar.

Interpol.

Interpol.

ADRIÁN CONTRERAS

Luego de este lamentable pero entretenido paréntesis salieron a escena una de las bandas más esperadas, Margaritas Podridas y su inusual shoegaze conquistaron al público, tanto a fanáticos como a los nuevos oyentes, Carolina Enríquez, bajista y vocalista de la banda de Hermosillo no dejo de agradecer y reiterar que era el escenario más grande que habían pisado hasta ahora, aunque era el escenario secundario.

Mientras en el escenario principal se presentaron Turnstile, oriundos de Baltimore, Estados Unidos, se trató de una grata sorpresa para esta alma errante, un sonido post punk hardcorero, algo fantastico y el público lo sabía, porque no pararon de cantar, bailar o simplemente agitar la cabeza al ritmo de lo estadounidenses.

Por otro lado y más tarde saltaron al escenario B las hermanas regias que han tomado por los cuernos a la escena del rock, The Warning, quienes abarrotaron el pequeño espacio que se les otorgó además de los espacio alrededor del mismo, bien pudieron estar en el principal, dieron un concierto redondo super emotivo y que confirma lo que muchos sabíamos, es una gran banda y desde hace tiempo que está para espacios importantes.

Peter Hook.

Peter Hook.

ADRIÁN CONTRERAS

Una locura poder salir de The Warning para ir a otro importante que nunca decepciona Interpol, que ya se siente como banda de casa, además de que la fanaticada se pone eufórica cuando Paul Banks habla su, ahora, perfecto español. una presentación perfecta, emotiva y nostálgica, la vieja confiable.

Otra de las grandes presentaciones y que por las problemáticas de planeación no se disfrutó al máximo, a manos que estuvieras en el área asignada al escenario B fue la salida de Peter Hook & The Light. Fuera de esta área no se escuchaba bien, la gente quería acercarse más pero esto era imposible, no había espacio. Sin embargo la presentación de la banda inglesa fue estupenda, mucho rock y mucha nostalgia a Joy Division.

Finalmente y ante un lleno importante saltaron al escenario principal Billy Corgan y compañía, The Smashing Pumpkins, que comenzaron con “Empires” y “Bullet with butterfly wings”, esta última que dota de nombre al festival. También y como cúmulo del evento hubo un performance con los luchadores de NWA.

The Smashing Pumpkins.

The Smashing Pumpkins.

ADRIÁN CONTRERAS

Los estadounidenses no dejaron de agradecer al público y a la organización detrás del festival, además de amenazar con regresar en la segunda edición. Fueron alrededor de dos horas de concierto y con la sorpresa de invitar al escenario a Peter Hook e interpretar “No love lost”, tema de Joy Division. Emotivo. Ahora de regreso a la realidad de una ciudad en caos pero con muchas canciones en el corazón.