Metrópoli

Austericidio en el Trolebús elevado en Iztapalapa ha frenado su entrega

En abril del 2021 de 1,002 empleados que estaban contratados por la empresa Idinsa, encargada del proyecto, 932 fueron despedidos o algunos renunciaron, ya que los responsables de la compañía constructora les notificaron en juntas internas que “por falta de presupuesto”, al no haber recibido varios pagos que seguían pendientes por parte del Gobierno de la Ciudad de México, no tenían para “comprar más materiales y tampoco para sus salarios”.

En la terminal Constitución de 1917 están unas herraduras de acero en espera de que sean colocadas trabes que soportaran el arribo del trolebús.

En la terminal Constitución de 1917 están unas herraduras de acero en espera de que sean colocadas trabes que soportaran el arribo del trolebús.

Mario D. Camarillo

La austeridad en el gobierno de la Ciudad de México ha frenado el avance de la construcción del Trolebús elevado y su entrega a la ciudadanía en la alcaldía Iztapalapa, al oriente de la capital, y es que el presupuesto para el avance de esta obra ha sido interrumpido por las autoridades capitalinas, de ahí el retraso en su entrega y los cambios en las fechas para su supuesta inauguración, pero lo grave no es eso, sino que por la falta de pagos a la empresa encargada de la obra, ésta se vio obligada a despedir a más de 900 trabajadores por falta de presupuesto.

En abril del 2021 Crónica habló con varios trabajadores de esta obra quienes aseguraron que de 1,002 empleados que estaban contratados por la empresa Idinsa (Impulsora de Desarrollo Integral S.A.de C.V.), encargada del proyecto, 932 fueron despedidos o algunos renunciaron, ya que los responsables de la compañía constructora les notificaron en juntas internas que “por falta de presupuesto”, al no haber recibido varios pagos que seguían pendientes por parte del Gobierno de la Ciudad de México, no tenían para “comprar más materiales y tampoco para sus salarios”.

Con este problema encima, la empresa sólo se quedó en aquel momento sólo con 70 trabajadores, ya que muchos fueron despedidos y otros decidieron renunciar, ya que no quisieron esperar a que el gobierno capitalino se pusiera al corriente con el pago de sus adeudos, ya que primero estaba ver por sus familias.

En abril del 2021 Crónica realizó un recorrido por la zona y constató que los trabajos solo se concentraban en la zona conocida como Tinacos o la Ford, en la colonia Santa cruz Meyehualco, dado que se trabajaba en la nivelación del terreno y en la extracción de agua del terreno, que era lo que dificultaba la colocación de trabes para los cimientos de algunos soportes de concreto.

Camiones que transportan material para la obra permanecen estacionados a un costado del sitio donde estará la terminal Constitución./

Camiones que transportan material para la obra permanecen estacionados a un costado del sitio que dará acceso a la terminal Constitución./

Mario D. Camarillo

Un ingeniero de la obra consultado en aquel momento por este diario informó que “el tramo en el que se trabaja ahora es en el camellón que abarca desde la Calle 17 y hasta la avenida Santa Cruz Meyehualco, también conocida como Tinacos o Ford (en la colonia Reforma Constitucionalista). Para avanzar en la obra se realizó un estudio de suelo y se encontró que en este tramo había agua, por lo que una vez que se procedió con retirarla, el siguiente paso fue el secado y verificar el soporte del suelo para la colocación de los pilotes de concreto, que es prioridad para avanzar en la obra”.

Cuando se anunció el inicio de la obra en mayo de 2020, se informó que a lo largo de la vía del Trolebús Elevado se contemplaba la construcción de 14 puentes peatonales y la creación de cruces seguros, pasarelas y demás infraestructura para garantizar la seguridad de los peatones que transitaran por la zona, pero al parecer el proyecto fue cambiado o fue improvisado, ya que hasta la fecha no existe ningún puente peatonal en los puntos de acceso de esta obra.

El proyecto inicialmente debió inaugurarse en abril del año pasado, pero los adeudos del G-CDMX con la empresa constructora y proveedores de los materiales, a lo que se sumó el despido de casi todos los empleados, frenaron ese primer intento para la entrega y puesta en marcha.

Desde aquel momento se pensó que la obra tardaría un año en entregarse dados los obstáculos que se presentaron, sin embargo, la Jefa de Gobierno Claudia Sheinbaum, se aventuró a decir que la obra estaría lista para noviembre de ese mismo año, sin conocer cómo estaban los avances o si es que los había.

Grúas que apoyan en el levantamiento de trabes de acero de la obra del Trolebús Elevado fueron estacionadas bajo el puente del Periférico, sobre Ermita Iztapalapa./

Grúas que apoyan en el levantamiento de trabes de acero de la obra del Trolebús Elevado fueron estacionadas bajo el puente del Periférico, sobre Ermita Iztapalapa./

Mario D. Camarillo

Por supuesto no hubo tal inauguración, ya que la obra seguía con muchos pendientes, a pesar de que ya se había reactivado la contratación de personal para reactivar los trabajos en el Trolebús elevado.

Pasó el tiempo y los trabajos iban a cuenta gotas, y nuevamente se anunció una nueva fecha de inauguración para abril del 2022, lo que nuevamente quedó sin concretarse, ya que las políticas de austeridad así lo impidieron al destinar presupuesto para otras cosas y no para este proyecto que sigue a paso lento.

Nuevamente en un cuarto intento por inaugurar la obra, la mandataria capitalina solo presentó una estación acondicionada (la de Santa Cruz Meyehualco) para anunciar nuevamente que para julio próximo ahora sí va la inauguración del Trolebús, sin embargo hay muchos pendientes, como son las colocaciones de trabes que enlacen la estación Deportivo Santa Cruz con la parte inicial que partirá de la estación Constitución, tramos que siguen inconclusos y que sólo un milagro harían que sin contratiempos y con un buen trabajo sin improvisaciones sea entregado en un par de meses.