Fernanda Sabalza Sánchez, de 19 años, fue asesinada en calles de Los Reyes Ixtacala en Tlalnepantla de Baz; salió de su casa el pasado 20 de junio del 2020 para arreglarse las uñas y después ir a una fiesta con su novio. 

Esa misma noche fueron a recogerla, pero muerta. El responsable, un hombre que le disparó en la cabeza, la acompañaba y discutían mientras estaban en una tienda ubicada en avenida Somex y Barrios. El asesino sigue libre sin que las autoridades hagan justicia. 

"No entendemos porque le arrebataron la vida", mencionó Mauricio Sabalsa, padre de Fernanda, quien cuenta a Crónica que ella era una chica con muchos sueños por cumplir, quería ser maestra y alguien le arrebató la vida, "la obligaron a dejarnos, sin cumplir sus metas, sin poder abrazar de nuevo a su hijo, a su familia, a su mamá, a mí". 

Hasta la fecha no hay detenidos, ninguna línea de investigación, no hay orden de aprensión a pesar de pruebas que ha recaudado su padre por sus propios medios; la Fiscalía General de Justicia del Estado de México a 1 año 8 meses no ha dado respuestas favorables. En noviembre 2021, lograron desbloquear el móvil de Fernanda y todo gracias a que su papá pidió apoyo a un perito profesional externo a la fiscalía mexiquense. Sólo así encontraran información importante.

A pesar de la información que recaudaron, las autoridades no han hecho nada; la semana pasada los padres de Fernanda hablaron con la Fiscalía de Barrientos y ésta argumentan que la Policía de Investigación (PDI) fue la que inició la investigación del caso de Fernanda y en la actualidad se sustituyó por un equipo nuevo, por lo que la información que tenían se esfumo.

"Me comentan que perdieron 2 discos con los videos de aquel día, el MP desconocía esa información y no entiendo como trabajen", lamenta Mauricio, quien agregó que la Fiscalía y el MP no están trabajando en conjunto y solo han perdido la información; "cada que pregunto algo ellos no saben, no me dan respuesta, sólo trabas aún con información que yo mismo he investigado".

"Le pido a la coordinadora de la Fiscalía en feminicidios Dylcia García que ya se ponga a trabajar, tienen infinidad de casos y ninguno resuelto, hace poco le marqué y le pregunté por mi caso, a lo que respondió que ella tenía mil carpetas y yo sólo una. Entonces si no puede que mejor renuncie y que deje el caso a gente y personas que en verdad quieran trabajar", expresó su padre. 

Aceptó que antes no entendía por qué las mujeres que marchaban estaban tan enojadas, hasta ahora que ha vivido en carne propia la injusticia.

“Yo no me daba cuenta de lo que hacían, yo lo veía en la televisión y hasta decía: ay estas chavas están mal, están  locas, ¿Qué quieren? Pero hasta que uno lo vive como ahorita, que estoy tan metido en esto,  se entiende, es inimaginable, la verdad”, afirmó.