"No somos uno ni somos diez, pinche Gobierno cuéntanos bien. Clara, no hiciste nada por nosotros, llévate tus Utopías, vete de aqui"; es lo que gritaban los habitantes de la colonia Estrella del Sur a la llegada de Santiago Taboada, en su evento más reciente en la alcaldía Iztapalapa.

Lejos de ser mal recibido en una alcaldía extremadamente inclinada a la Cuarta Transformación, desde su arribo, los comerciantes del barrio se acercaron para pedirle que sacara a los extorsionadores y a las bandas que en su dicho, Clara Brugada y su proyecto de "abrazos no balazos", dejaron entrar al territorio más grande de la ciudad.

Previo a subir al templete, los habitantes de la unidad habitacional bajaron de sus casas para platicar con él, además de tenderos de tienda de abarrotes, farmacias y vendedores ambulantes de paletas, a los que también, les piden "su piso" para trabajar libremente.

"Le pido a Dios que este señor gane y nos ayude, alguien nos tiene que salvar de la Cuarta Transformación, a cada rato vienen por su moche y es gente que ves caminando por aquí, no tienen miedo, pero hay que abrazarlos, quererlos mucho, ellos bien y nosotros adentro, ya ni quiero vender, no me sale", dijo una vendedora de elotes.

"Eres una vergüenza Clara, no hiciste nada por nosotros ¿Dónde está el agua que nos prometiste? Que Morena vaya y que chingue a su madre, sáquense de aquí, ni vengas porque te vamos a sacar, nos hundiste con tus utopías", comentó un taxista.

El evento se retrasó más de 15 minutos, debido a que las más de 500 personas que acudieron querían saludarlo y una fotografía con él. El candidato desaparecía en las decenas de banderas del PRD que ondeban. Sin embargo, su arribo se hizo ameno por un grupo de hip hop que lanzaba porras hacia Taboada y como si hubieran ensayado, los asistentes entonaban los cantos.

"Santiago, papucho, Iztapalapa te quiere mucho, vota por el PRD, juntos vamos a ganar. Santiago, papucho, salva a Iztapalapa de la 4T y de la extorsion", decían.

"Yo digo Santiago, tu dices Taboada, todos a bailar", "vota PRD, con Taboada tendemremos una Iztapalapa igual que la BJ"; en ese momento, el público comenzó a bailar, adultos mayores, niños y amas de casa.

Aquellos que no lograron alcanzar lugar, observaban el espectáculo desde sus azoteas, con banderas del PRD, pintaban las terrazas de amarillo.

Taboada pudo llegar al templete, acompañado de su pareja y de la candidata a esa alcaldía, Karen Quiroga, las porras crecían mientras más avanzaban. El candidato no podía empezar a hablar, las porras eran más fuertes que su voz, las "cinco de Taboada" tuvieron que esperar, las ganas de los oriundos de expresar su repudio hacia Morena urgía ante cualquier discurso.

"No somos uno, no somos diez, pinche Gobierno cuéntanos bien, arriba el PRD. Estasmuy guapo güero, no te vayas nunca, por favor cásate conmigo, saca de aquí a Morena".

"Karen, princesa, te queremos de alcaldesa", también se escuchaba. El tumulto también se pintó de verde, debjdo que al bailar, todos levantaron sus nieves de limón y mango, la fiesta y el baile invadió la calle.

Una de las propuestas de Quiroga fue extinguir las Utopías y convertirlas en hospitales, a lo que la mayoría de los asistentes aplaudieron. Argumentos como albercas con falta de agua en albercas y centros de adicciones abandonados, abundaban entre los habitantes.

"No sirven, a mí me querían cobrar por ir a la atención a la mujer, no tenemos nada de esa señora".

Otro de los aspectos que emocionó al público fue la entrega del "salario rosa chilango", algo que a las amas de casa las puso a bailar y a las de la tercera edad, las hizo pararse sobre las sillas.

"Así si voto por ti, me vas a dar mi dinerito, pero te prometo que lo voy a invertir en algo y te voy a invitar mi güero precioso", dijo una señora.

Taboada bromeó con ellas: "el dinero que les vamos a dar les va a alcanzar hasta para el sancho", ahí, a manera de broma, una señora le dijo a su esposo: "ya ves amor, para mi novio".

Las porras continuaban y el ánimo de desaparecer las utopías impulsó la esperanza de la gente para otorgarle el voto a Taboada. "Ese apoyo sí se ve", excalamaban.

Una de las urgencias más grandes de los habitanfes fue la falta de vigilancia, hecho que según los habitantes ha llegado a un limite, cuando los negocios que tardan más de un año en comstruirse, se derrumban por la cuota negra que cada semana sube.

"Qué casualidad que las chelerías siguen abiertas, son las únicas a las que nadie les pide piso, pero a las estéticas y hasta a las casas se les pide, hasta dónde hemos llegado, por eso que chingue a su madre la Cuarta Transformación, viva el PRD que nunca tuvo que irse de Iztapalapa", relató un comerciante.