Metrópoli

Vinculan a proceso a seis empleados del "Black Royce" por la muerte de Íñigo Arenas

La FGJEM acreditó su probable participación en el homicidio, ya que durante el cateo se hallaron sobres con cocaína y goteros con los que aparentemente drogaban a los clientes para saquear sus tarjetas de crédito sin autorización

Caso Íñigo Arenas

Vinculan a proceso a seis empleados del

Eduardo "N", capitán de meseros del "Black Royce" habría persuadido al empresario a subir al área "VIP" del bar.

FGJEM

Un juez del penal de Barrientos en Tlalnepantla de Baz vinculó a proceso a los seis trabajadores del club nocturno "Black Royce" señalados de presuntamente haber colaborado en el homicidio del empresario Íñigo Arenas, sujeto que fue encontrado sin vida el pasado seis de agosto en una de las salidas del bar.

A pesar de que la defensa de Aritzi "N", Ana Karen "N", Cecilia "N", Ana Karen "N", Eduardo "N" y Carlos Daniel "N" aportó supuestas pruebas que demostraban su inocencia, la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) acreditó su probable participación en el homicidio, ya que durante el cateo se hallaron sobres con cocaína y goteros con los que aparentemente drogaban a los clientes para saquear sus tarjetas de crédito sin autorización.

La FGJEM subrayó que Eduardo "N", capitán de meseros del "Black Royce" habría persuadido al empresario a subir al área "VIP" del bar, zona que su ubica en la planta alta. Dado que se encontraba en estado de ebriedad, las mujeres mencionadas abrieron botellas de bebidas embriagantes y la cajera del establecimiento hizo cargos sin autorización a la tarjeta de crédito de Arenas por más de 40 mil pesos.

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Cámara de vigilancia del bar Black Royce

Posteriormente, la víctima permaneció en el área con las mujeres, ya que presuntamente Arenas no se sentía bien y su piel se tornó a color morado, por lo que inmediatamente le solicitaron al guarida de seguridad Carlos Daniel "N" que le aplicara la práctica RCP de primeros auxilios.

Seguido de la ayuda ejercida por el guardia, el empresario no mejoró su condición de salud y tuvieron que llamar a los servicios de emergencia y mantenerlo en una de las salidas de emergencia del Black Royce, sitio donde fue encontrado sin vida por las autoridades.

De acuerdo con el dictamen, el contenido gástrico combinado con altas cantidades de alcohol y sustancias químicas de naturaleza controlada cerraron las vías respiratorias del finado, acción que limitó su conciencia y actividades motoras, provocándole la muerte instantánea dentro de las instalaciones del bar ubicado en el municipio de Naucalpan, Estado de México.

Las autoridades determinaron un plazo de dos meses para el cierre de la investigación complementaria, tiempo en el que el abogado de los imputados tiene la oportunidad para aportar más pruebas, testimonios y declaraciones que ayuden a demostrar la inocencia de los trabajadores.

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Mientras se realizaba la audiencia de los empleados del "Black Royce", trabajadores de diferentes bares del área metropolitana realizaron un mitin en el exterior del penal, pues afirmaron que la Fiscalía del Estado de México culpó injustamente a los seis trabajadores del antro al señalarlos de drogar y embriagar a los clientes para extorsionarlos.

Con carteles que decían "no a la fabricación de delitos", "somos meseras, no goteras", los empleados exigían a las autoridades que liberara a los seis culpados del homicidio, pues afirmaron que el fallecimiento de Arenas fue un accidente y el cateo donde se hallaron múltiples sobres con cocaína y dispositivos con los que presuntamente se administraban drogas en las bebidas de los clientes, son pruebas falsas y fabricadas por el Ministerio Público y la Fiscalía.

Igualmente aseguraron que no existe alguna red de extorsión que vincule a taxistas de la Ciudad de México con la administración del bar, luego de que el gerente del "Black Royce" confesó que los choferes ganaban una cuota si invitaban a personas a quedarse toda la noche en el club.