Denuncian pobladores de Tanhuato, Michoacán ante CNDH abusos de la Guardia Nacional
Pidieron al presidente Andrés Manuel López Obrador, su intervención para regular esta situación y exigieron abrir una investigación para que se castiguen los presuntos abusos y agresiones cometidas por los uniformados.
agresiones
Elementos de la policía municipal de Michoacán
Habitantes del poblado de Tinaja de Vargas, del municipio de Tanhuato, Michoacán denunciaron ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos una serie de agresiones, robos y abusos contra los pobladores del lugar, incluyendo golpizas, por parte de elementos de la Guardia Nacional y del Ejército Nacional quienes hicieron de ese lugar su base de operaciones presuntamente para combatir la inseguridad.
En la que queja 7186/ 2024, interpuesta ante la Segunda Visitaduría de la CNDH, los habitantes del municipio de Tanhuato, Michoacán, acusaron que la madrugada del jueves 18 de enero, las tropas de la Guardia Nacional y del Ejército entraron furtivamente al poblado y catearon una propiedad donde se apoderaron de objetos, dinero y animales e igualmente pretendieron hacer lo mismo en otros domicilios, pero la gente se los impidió.
Denunciaron que los militares colocaron retenes en las entradas y salidas del poblado, para impedir que los habitantes pudieran moverse con libertad o realizar sus labores en el campo e incluso han sido objeto de amenazas y agresiones por parte de los uniformados.
Pobladores repelen la agresión
Por ello, los pobladores, entre ellos José Alfredo Ávalos Trujillo, Alberto Rodríguez Mendoza y José Juan Vera García, pidieron al gobierno, encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, su intervención para regular esta situación y exigieron abrir una investigación para que se castiguen los presuntos abusos y agresiones cometidas por los uniformados.
Asimismo, pidieron la presencia de la CNDH para que den testimonio de las acciones consideradas como ilegales por los habitantes de este lugar, cuya principal actividad es agrícola de autoconsumo, además de pedir la reparación de los daños y robos en casas.
Parte de las agresiones cometida por supuestos elementos de las fuerzas de seguridad es la herida de bala, contra José Alfredo Avalos Trujillo, de 19 años de edad, quien fue interceptado por un convoy de uniformados y hombres de negro que los bajaron a golpes del vehículo en el que se trasladaban a trabajar en una zona agrícola.
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Ante representantes de la Segunda Visitaduría General de la CNDH, el afectado señaló que ello generó protestas de los habitantes del lugar quienes se defendieron arrojando piedras y otros objetos a los elementos que lo perseguían, por lo cual los oficiales comenzaron a disparar al aire, e incluso de forma directa a la gente, por lo cual Avalos Trujillo, recibió un impacto en la clavícula izquierda.
Según informaron la tensión en el lugar ha ido en aumento en las últimas horas, luego de los rondines, retenes que han instalado en calles y revisiones ilegales a propiedades que han realizado los miembros de la Guardia Nacional y del Ejército, así como hombres vestidos de negro.
Denunciaron que desde el jueves 18 de enero más de 60 camionetas de la Guardia Nacional y del Ejército sitiaron la comunidad donde habitan más de 600 familias y tomaron como base de operaciones la escuela primaria del lugar e impiden que acerque la gente que se inconformó por la cancelación de clases a donde asistían unos 150 niñas y niños.
Camioneta impactada por balas
En entrevista, habitantes del lugar, entre ellos José Alfredo Ávalos Trujillo, denunciaron que los integrantes de la Guardia Nacional y del Ejército asumieron una actitud de beligerancia contra los pobladores, a quienes insultan, gritan, o bien hacen disparos al aire o en lugares cercanos a la gente para asustarlos.
En ese sentido, habitantes de la comunidad demandaron al gobierno federal su intervención para que cese el hostigamiento contra la población de ese lugar que se inició desde el jueves pasado, principalmente las detenciones arbitrarias y permitan que los lesionados sean atendidos por personal médico, ya que muchos de los pobladores del lugar recibieron golpes severos sin que hasta el momento puedan ser atendidos debidamente.
Dijeron que los habitantes de este poblado se encontraban viviendo en tranquilidad, pero la llegada de las fuerzas federales trastocó la vida de toda la comunidad, en especial de las mujeres y niños que viven en constante miedo.
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