Las partituras de las danzas que escribió Miguel Lerdo de Tejada, los originales de interpretaciones que hizo Juventino Rosas y algunas composiciones de Abundio Martínez son parte del acervo de la Orquesta Típica de la Ciudad de México que resguarda el Archivo Histórico del Ciudad de México y que actualmente rescatan Salvador Guizar y Arturo Quezadas Luna, directores de dicha agrupación fundada a finales del siglo XIX y reconocida en 2011 como patrimonio cultural intangible de la capital.

En sus ocho años de trabajo con el Coro de la Orquesta Típica, Salvador Guizar comenta que una parte fundamental del patrimonio de la orquesta, además de la combinación inusual de instrumentos sinfónicos y típicos (salterios, bandolones, marimbas), es su repertorio, por ello la importancia de revisar los documentos que aloja el archivo ubicado en el número 8 de la calle República de Chile.

—¿Cuántas obras existen en el Archivo?

—Hay 1,066 archivos, cada uno con una obra distinta, con un arreglo distinto y el interés de esta investigación parte de la necesidad profesional de incrementar el repertorio en la parte vocal de la orquesta, pero también se ha visto extendido a la parte instrumentista.

“Esta tarea de rescate lo que pretende es hacer una revisión de los expedientes, darles un ordenamiento, datar las piezas o tratar de tener la fecha de composición y establecer la dotación instrumental que tiene cada una de estas obras. Porque a lo largo del tiempo la Orquesta Típica no ha sido la misma, nació siendo una orquesta pequeña de cámara y con el paso de los años fue creciendo al grado de que ahora es una orquesta sinfónica con instrumentos típicos”, expresa Guizar.

Al respecto, Arturo Quezadas Luna, director de la orquesta, señala que la Típica nació en 1884 con 15 músicos y ahora suman 85 integrantes. “La orquesta se inició como una orquesta de cámara, entonces hay arreglos que son para típicos y para un violín y una flauta, por eso en los conciertos hemos hecho un proyecto que le llamamos La Típica de 1884, en donde iniciamos con 15 músicos, simulando a la antigua Típica”.

Guizar precisa que por el momento se encuentran en los primeros pasos del rescate musical: hacer un diagnóstico de las partituras y obras que aloja el Archivo Histórico, para que en enero de 2017 exista un orden y puedan plantear la digitalización de obras originales y de aquellas que la orquesta pueda ejecutar en conciertos.

“También queremos hacer un catálogo más ampliado, no solo decir que esta obra es de Carlos Curtis, el primer director que tuvo la orquesta, o que es un vals de Lerdo de Tejada, nos interesa saber el año de composición, ver qué corrientes e influencias hubo, saber la dotación instrumental y si está ausente la partitura del director”, indica Guizar.

Al final, la intención es publicar una edición con partituras emblemáticas, por ejemplo, aquellas que fueron las primeras que tocó la orquesta, y coronar el proyecto con una grabación de las versiones revisadas, agrega el investigador.

NUEVO REPERTORIO. Para Salvador Guizar, el repertorio de la Orquesta Típica es patrimonial no sólo por ser parte de la historia del orquesta, sino porque las obras van del siglo XIX hasta nuestros  días, lo cual describe el desarrollo de la música en México, “porque la orquesta tiene un peso histórico y su música pesa en el desarrollo de lo que se identifica como mexicano".

—¿Cuáles son los compositores que aparecen en el Archivo Histórico?

—Por ejemplo, hay obras de Juventino Rosas, que fue miembro de la Orquesta, no se sabe a ciencia cierta si dedicó algunas de sus obras a la Orquesta Típica, pero estoy seguro que tocó en ella. También hay piezas de Juan N. Torreblanca y de su Orquesta Torreblanca que era la competencia de la Típica, sin embargo, en algún momento compartieron arreglistas y hasta repertorio, incluso, en esta investigación de rescate habrá un apéndice porque hace cuatro años un familiar Torreblanca donó acervo a la Orquesta Típica, esos documentos están en nuestro archivo corriente, por decirlo de alguna manera, pero ése es otro trabajo que haremos.

Otros nombres que figuran en las partituras, son: Juan Velázquez, segundo director de la orquesta; Miguel Lerdo  de Tejada, tercer director de la agrupación; Ignacio Fernández Esperón, Tata Nacho, José Antonio Zavala Rocha, Mario Kuri Aldana, Alfonso Esparza Oteo, María Grever, Manuel Esperón y Pablo Marín.

Quezadas Luna agrega que todo el material resguardado en el Archivo Histórico de la Ciudad de México fue tocado por la Típica y, desde entonces, varias obras no han vuelto a sonar.

“La maestra y soprano Cristina Ortega que estará de solista con nosotros en un concierto de aniversario que ofreceremos el 1 de septiembre en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris nos ha donado 4 partituras que Tata Nacho escribió para ella, porque la maestra antes de hacer una carrera como cantante de ópera, fue solista de la Orquesta Típica bajo la dirección del maestro Tata Nacho”.

—¿Cuáles piezas, que se encuentran en el Archivo, han incorporado a su repertorio?

—En los últimos meses entre 30 y 40 obras que, como muestro, son las que empezamos a reincorporar al repertorio. Por ejemplo, un par de arreglos de Agustín Lara, de Rubén Fuentes, este autor identificado con la música de mariachi y en el mes de septiembre tocaremos una obra de Tata Nacho que Cristina Ortega envío: Primaveral.

“De la música más antigua se está haciendo algo con unas danzas de Miguel Lerdo de Tejada, como es el caso de La danza de los apuros. También se hizo una revisión de la rúbrica de la Típica, porque hay diferencias entre los papeles y es necesario revisarla, otro ejemplo son las obras que hizo Abundio Martínez”, destaca Salvador Guizar.

El actual rescate de las partituras se realiza con apoyo del Cenidim y con registros hemerográficos, como reseñas en periódicos de la época y en algunas grabaciones. “Sí hay grabaciones de la antigua Típica, algunas de la época de Pablo Marín y de Lerdo de Tejada, por ejemplo, una obra que acabamos de tocar en el Parque de la Bombilla, “El limoncito”, dicen que era la canción preferida de Álvaro Obregón y que la orquesta la estaba tocando cuando lo asesinaron. Hay una grabación muy antigua de esa obra por la Típica”, concluye Guizar.