Un oficial de la Policía Federal Preventiva (PFP), una joven pareja y un deportista fueron asesinados en distintas acciones en Chihuahua, sacudido por una ola de violencia, informaron fuentes oficiales.
El oficial de la PFP Benito Javier Flores Sotelo, de 34 años, fue asesinado hoy en Ciudad Juárez, urbe fronteriza con Estados Unidos, por desconocidos que le dispararon con fusiles de asalto afuera de su casa y en presencia de su esposa.
Flores Sotelo estaba en el interior de su vehículo, que se encontraba estacionado frente a su domicilio, y se disponía a trasladarse a su trabajo cuando unos sujetos se le acercaron y lo acribillaron.
Por otra parte, fuentes de la Subprocuraduría de Justicia de la Zona Norte (SJZN) reportaron el hallazgo hoy de un hombre y una mujer, de entre 25 y 30 años, asesinados a tiros también en Ciudad Juárez.
Los cuerpos, aún sin identificar, estaban esposados con las manos hacia atrás y tirados boca abajo en el piso y a simple vista presentaban heridas de arma de fuego en la cabeza.
Los cadáveres fueron hallados a un costado de una camioneta en un terreno baldío y en el parabrisas del vehículo fue dejado un mensaje con la leyenda: "Esto les va a seguir pasando montaperros, si siguen apoyando El Chapo", en aparente alusión a Joaquín "El Chapo" Guzmán, del cartel de Sinaloa.
Dentro de la ola de violencia que azota al estado más grande de México, en la capital de Chihuahua fue asesinado un físico culturista, identificado como Carlos Roberto Rojero Muñoz, de 39 años.
El atleta viajaba en su automóvil cuando fue perseguido por sicarios que le mataron a balazos con armas de distintos calibres.
Chihuahua es uno de los estados del norte del país donde los carteles han desatado una escalada de violencia en su lucha por el control de las rutas de drogas hacia Estados Unidos.
El Gobierno federal envió a esa zona desde marzo pasado a 2.250 efectivos de fuerzas combinadas de solados y agentes federales para contener al crimen organizado.
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