‘El amor según Dalva’ triunfa en los premios del cine belga con su trama de abuso infantil
COBERTURA. Fue la gran triunfadora anoche con siete galardones, incluido el de mejor película, en la gala de los Premios Magritte
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Imagen del momento en que ganan el premio principal.
El amor según Dalva fue la gran triunfadora anoche con siete galardones, incluido el de mejor película, en la gala de los Premios Magritte del cine belga, que consagraron esta cinta que aborda la problemática de los abusos sexuales en la infancia, en una ceremonia convertida en un clamor por el alto al fuego en Gaza.
Este film de Emmanuelle Nicot, de 38 años, fue distinguida anoche con el premio a la mejor dirección, también obtuvo el Magritte a mejor ópera prima, mejor guión original, mejor sonido, mejor actriz de reparto para Sandrine Blancke y mejor actriz revelación para Zelda Samson, de apenas 15 años.
Samson es la actriz que interpreta a Dalva, la protagonista del film, dando vida a una niña de 12 años que debe aprender a volver a situarse en el mundo y a recuperar la infancia perdida tras ser apartada de su hogar, donde sufrió abusos sexuales por parte de su padre, para irse a vivir a una casa de protección infantil, donde deberá separarse de una relación abusiva que le cuesta romper.
La directora Emmanuelle Nicot deseó al terminar la ceremonia que esta película sirva para concienciar sobre esta problemática, y admitió que “no esperaba” salir de los Premios Magritte como película más laureada, ya que todos los pronósticos situaban como gran favorita a Augure, el film que obtuvo más nominaciones.
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Augure, del director belga-congoleño Baloji, acabó siendo la segunda película más premiada de la gala de los Magritte y se impuso en cinco de las trece categorías en las que estaba nominada, logrando la estatuilla a mejor actriz de reparto para Yves-Marina Gnahoua, mejor imagen, mejor ambientación, mejor vestuario y mejor banda sonora.
Lubna Azabal, belga de madre española y padre marroquí, ganó el premio a mejor actriz por su papel en la película El caftán azul, mientras que Arieh Worthalter ganó la estatuilla a mejor actor por su interpretación en El caso Goldman.
El cineasta colombiano Sergio Guataquira, afincado en Bélgica, se impuso en la categoría de mejor documental con su producción Despedida salvaje, que transporta al espectador a un pueblo indígena de Colombia afectado por una oleada de suicidios.
Otras cintas ganadoras en los Premios Magritte, más enfocados al cine belga francófono, fueron Le syndrome des amours passés (El síndrome de los amores pasados), que obtuvo el galardón al mejor montaje y al mejor actor revelación para Lazare Gousseau, o Les Silents (Los silencios), que se impuso en la categoría de mejor cortometraje de ficción.
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Debacle, rodada en neerlandés y dirigida por Veerle Baetens, fue galardonada con el Premio Magritte a mejor película flamenca.
Durante la ceremonia de anoche, los profesionales de la industria cinematográfica belga llamaron a detener la guerra en Gaza y mostraron su solidaridad tanto con las víctimas palestinas en la Franja, que ya superan los 31 mil muertos, como con las víctimas de los ataques perpetrados por Hamás el 7 de octubre en Israel, que dejaron a mil 200 fallecidos y 250 secuestrados.
En un momento de la gala, subieron al escenario decenas de actores, directores y otros profesionales del cine belga para realizar una petición unitaria para lograr el alto al fuego en Gaza y la liberación de los rehenes secuestrados por Hamás.
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