Harry Styles y la clave para formar a un ícono musical
El artista británico se presentó este noviembre en el Foro Sol como parte de su Love On Tour con dos conciertos que provocaron algunas reflexiones
opinión
Harry Styles en el Foro Sol de la CDMX.
En la historia de la música existe una extensa lista de frontman masculinos que han marcado generaciones a nivel mundial, inmediatamente nombres como Elvis Presley, Elton John o Ian Curtis llegan fácilmente a mi memoria, así como otros más que salieron de agrupaciones para despegar en solitario y trascender más allá de sus proyectos iniciales, tal como lo lograron Michael Jackson y Justin Timberlake.
Pero durante tertulias con amigos y colegas una pregunta ha sido recurrente: ante la actual variedad de propuestas ¿volveremos a ver surgir a nuevos íconos musicales con ese nivel de impacto?
Dicho cuestionamiento regresó a mi mente tras la visita de Harry Styles a México como parte de su Love On Tour, con el que se presentó en Guadalajara, Monterrey y más recientemente en la Ciudad de México en el Foro Sol, el pasado 24 y 25 de noviembre.
Love On Tour. Guadalajara. November, 2022. pic.twitter.com/HQqdAV3M3u
— Harry Styles. (@Harry_Styles) November 21, 2022
Más allá de gustos y géneros, algo es cierto, tras separarse de la boyband One Direction en 2016, el artista británico no tuvo dificultades para ascender rápidamente dentro de la industria y captar la atención de la crítica y el público, rompiendo completamente con la imagen y estilo que mantuvo junto al quinteto.
Su material homónimo con el que debutó como solista contó con la participación del ganador del Grammy (2016), Jeff Bhasker, responsable del álbum de Kanye West, Donda, quien también ha trabajado con destacadas figuras como Mark Ronson o Jay-Z; asimismo, en los créditos del disco aparece el nombre de Tyler Johnson, ingeniero de Red (2012) de Taylor Swift y de Ed Sheeran para X (2015).
Dicha producción fue lanzada en 2017 por Columbia Records y su primer sencillo “Sign of the times” se posicionó a la cabeza de las listas en Reino Unido alcanzando la cuarta posición de Billboard Hot 100; el álbum ha vendido más de cuatro millones de copias en todo el mundo, pese a recibir una crítica medianamente “buena” y “aceptable” por parte de la crítica internacional.
No obstante, el impacto mediático que ha acumulado desde entonces con Fine Line (2019) y su reciente Harry's House (2022) provocó un fenómeno pocas veces presenciado por mí, el pasado jueves, en el foro capitalino, donde reunió a varias generaciones; un público conformado principalmente por adolescentes, niños y adultos que fueron parte del show nocturno.
Un público interactivo que mantuvo la piel erizada durante la poco más de hora y media que duró el concierto; y que aparentemente también consiguió conmover al cantante inglés.
Entre la oscuridad destacaron diademas luminosas, bufandas de plumas y brazaletes parpadeantes que más tarde encendieron las gradas de amarillo durante la interpretación de “Golden”, uno de sus temas más populares, con el que superó 82 millones de reproducciones en YouTube a tan solo dos meses de haber lanzado su videoclip oficial.
La arrolladora presencia de Styles en el escenario al estilo Mick Jagger, es tan solo la punta de un iceberg que engloba a un grupo de músicos de primer nivel integrado por Elin Sandberg (bajo), Niji Adeleye (teclado), Pauli Lovejoy (percusiones), Mitch Rowland (guitarra), Sarah Jones (batería) y Ny Oh (guitarra y coros), quienes son fundamentales para el éxito de la actual gira mundial y que brillaron durante la actuación con una sorprendente destreza, la cual les mereció la ovación por parte de los asistentes.
Más allá de ser un producto comercial —que para los listillos ‘expertos’ en música, generalmente es algo ‘sobreestimado’—, el talento y calidad detrás del proyecto de Harry Styles ha sabido mezclar la cadencia del funk, el jazz y el blues con la balada, al estilo de un rockstar, resultando en un espectáculo digno de evolucionar a convertirse en un ícono musical.