Ianis Guerrero y ‘El Halcón’: “Me parece muy mal que el cine de luchadores y otros géneros estén despreciados”
ENTREVISTA. Crónica Escenario charló con el actor que da vida a el hijo de un luchador en el filme de Eduardo Valenzuela, una película que habla del luchador enmascarado como un héroe social y popular
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Fotograma del filme.
El cine de luchadores es uno de los más denostados dentro de la industria fílmica mexicana, desde la primera cinta del género, La bestia magnifica (Urueta, 1952) hasta las grandes épicas protagonizadas por personalidades como El Santo o Blue Demon, han atrapado la imaginación y atención del público mientras la crítica seria las ataca por sus escasos valores cinematográficos y tramas rebuscadas. Ahora, en 2024, surge una nueva cinta del género, El Halcón, dirigida por Eduardo Valenzuela y protagonizada por Guillermo Quintanilla e Ianis Guerrero. Una película que habla del luchador enmascarado como un héroe social y popular.
En Crónica Escenario tuvimos la oportunidad de charlar con Ianis Guerrero, quien da vida, en esta cinta, al hijo de “El Halcón”.
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Ianis, una película de origen para lo que puede llegar a ser una nueva serie de películas de luchadores, género que tenemos bien olvidado en México. ¿Cómo te involucras en esta película, en este proyecto?
Sí, totalmente, justamente es lo que tú dices. Es un género que tenemos un poquito olvidado, que tuvo un éxito muy grande con El Santo, con Blue Demon, y que vive, de alguna manera, en nuestros corazones, en el sentido de que yo creo que todos los mexicanos los tenemos muy presentes. Yo creo que es un símbolo que nos representa como país, como mexicanos. Tú te pones una máscara de un luchador en cualquier parte del mundo y te van a reconocer y te van a decir “de México” y te vas a sentir un superhéroe. Lo que nosotros queríamos hacer con esta película era rendirles un homenaje a todos estos superhéroes mexicanos. Y lo quisimos hacer de una manera un poquito vintage, por así decirlo, un poquito retro, porque tratamos de seguir algunas reglas de estas películas. Por ejemplo, no hay balazos en la película, ya que en las películas del Santo no hay y pues en esta película tampoco. Todos es a puño limpio, llaves, golpes, están persiguiendo un supervillano y queremos rendirle un homenaje a través mucho cariño, porque creemos que los mexicanos nos merecemos un superhéroe, Marvel existe y tiene superhéroes para los norteamericanos, pero también como mexicanos tenemos que tener un superhéroe que coma tacos, que baile, que baile cumbia, que sepa contar chistes, que tenga esta alegría del mexicano y que también quiera que su ciudad sea mejor, que también vea que la inseguridad está fuerte y diga “voy a ponerle un alto a todo esto” y voy a hacer algo para que cambie la situación”. Eso es lo que queremos retratar con El Halcón, hacer una película divertida, entrañable para toda la familia.
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Me gusta mucho que marca la desaparición del cine, bueno, de los luchadores en la película en los 70s, como ocurre con las películas de luchadores en el cine nacional. En la película se cuenta con una especie de alegoría esta desaparición en la noche de las máscaras tristes. ¿Cómo sentían ustedes? ¿Cuál era el sentimiento que tenían ustedes al estar filmando, sabiendo que estaban jugando mucho con este género y que además lo estaban trayendo de una manera muy familiar, como en ese tipo de cine antes?
Justamente es lo que queríamos hacer nosotros, hablar de estos luchadores de época, de antaño. Y la película está en un periodo de tiempo un poco abstracto, queríamos jugar con la percepción del espectador para que dijera, es moderno, pero también pudo haber pasado en los 90s o en los 2000s, ¿en qué época fue esto? El no darle tantos elementos para que el espectador solito se imaginara que esta historia fuera temporal. Y como en las películas de antaño, que era El Santo contra las momias y luego en el capítulo 2, El Santo contra las mujeres vampiros y luego en el capítulo 3, El Santo contra el enmascarado de oro, nosotros queríamos también hacer esta saga. Esta película está pensada para ser hecha en una trilogía y ahorita ya estamos desarrollando la segunda parte que esperamos filmar este año, esperando que el público responda y llene las salas y le guste esta película. Y que, gracias a eso, digamos “ok, sí vale la pena y hagamos la película 2”.
¿Qué tanta responsabilidad sentiste al ponerte tú una máscara de luchador?
Es una responsabilidad muy grande porque obviamente sabes que la gente te va a ver y no va a permitir que lo hagas mal. No se trata de poner en ridículo a nadie, al contrario, se trata de dignificarlos, de glorificarlos, de mostrar este coraje y este orgullo que tenemos los mexicanos. Y si tú te pones a pensar aún los luchadores que hoy en día pelean en la Arena México, de día tienen otras chambas, a lo mejor en la noche están peleando, pero de día son taxistas, son plomeros, son electricistas, son mecánicos, son periodistas. Yo no sé si tú a lo mejor eres un luchador en la noche también, ¿me entiendes? No lo dudes porque los hay. O sea, están incógnitos entre la sociedad y cuando menos te lo esperas, se te aparecen y te dicen “ah, yo soy luchador. De día soy doctor, soy neurocirujano, y de noche soy luchador”. Porque se ponen la máscara y se transforman.
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Me llama mucho la atención, el personaje que interpretas pareciera que es un personaje muy secundario, pero en realidad se va a convertir en el personaje principal de esta trilogía, por eso hablaba al inicio que es una película de origen. ¿Qué tanto te lleva a ti, Ianis, el actor, a domarte a ti mismo para aceptar papeles así, sabiendo que es a la larga donde vienen las cosas buenas?
Pues es una experiencia muy padre como actor, el contar algo que dure es algo muy padre. Cuentas una primera parte, luego una segunda parte, luego una tercera parte, cuarta parte, o las que sean necesarias, yo creo que como actor es una experiencia padrísima el tener mucho tiempo en pantalla para poder contarle al espectador esta historia. Y es una apuesta, es un riesgo y creo que está funcionando porque al final que Cinépolis decida distribuirla, que diga “sí, la voy a distribuir, hagamos algo grande, hagamos algo padre, hagamos algo que resuene muchísimo por todos lados”. Creo que justamente eso es lo que va a hacer que podamos filmar la dos y que podamos seguir continuando contando la historia de” El Halcón”, este superhéroe mexicano.
¿Qué tal fue trabajar con Eduardo Valenzuela? ¿Cómo fue este proceso para llevar la película?
Fue muy padre. Lalo es alguien que permite mucha interacción, que permite mucha comunicación, que permite mucho trabajo en equipo. Él sabe sacar lo mejor de las personas y la verdad que fue un placer trabajar con él, con todos los demás compañeros también, con los que comparto el reparto. Fue padrísimo. Y creo que ese es el secreto de hacer cine. Nunca haces cine solo, siempre lo haces en equipo. Entonces, hacer cine en equipo creo que fue lo que lo que hizo que esta película hoy en día esté en las salas de cine.
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Me gusta mucho también esta cuestión de que la película no solamente juega con el cine de luchadores. Hay unos ecos ahí al cine de los hermanos Almada, las películas de Intrépidos Punks, Siete en la Mira. ¿Cómo te sentiste tú al saber que estabas formando parte de unos géneros que son muy despreciados por la crítica especializada, pero que la gente en México ama?
A mí me parece muy mal que estos géneros estén despreciados. Me parece que son géneros artísticos muy, muy interesantes y que al final lo que hay que pensar es distinto. Yo creo que si tú te fijas en Internet, en las reproducciones en YouTube o en Facebook de estas películas, tienen millones de reproducciones. Eso significa que la gente las ve y las vuelve a ver y las pone y las ve otra vez. Entonces, yo creo que mal haríamos en denostarlas, mal haríamos en hablar mal de ellas, al contrario, me parecen grandes, grandes películas, grandes guiones y momentos también de actuación muy interesantes. Son películas completas y que tal vez en algunos momentos la producción no está tan bien y algunos cineastas pedantes las denostan, pero yo, al contrario, yo las ensalzo y me parecen grandes obras del cine mexicano.
Ianis, sabiendo que vas a hacer una trilogía, ¿qué tanto estás trabajando tú en tu físico para poder hacerlo, ¿cómo te sigues preparando? Porque va a exigirte mucho físicamente estas peleas.
Pues para empezar en esta película todas las escenas de stunt las hice yo, no tuve ningún stunt ni nada. Justamente lo hice como para irme preparando en este personaje y que esta historia se fuera contando cada vez más con lo que nosotros tenemos. Algo muy bonito que me gustó es que al final son seres humanos normales. Somos tú, soy yo, es cualquier persona que se quiera levantar y poner una máscara y que a lo mejor tú dices, no estás preparado para ser un luchador, para ponerte la máscara, pero quieres hacer algo por el bien de tu país, quieres hacer algo por tu ciudad, quieres hacer algo por tu padre y te pones la máscara. Creo que ese es uno de los secretos de la película, que los héroes somos todos, cada uno al cotidiano, cada uno puede ser un héroe.
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Mencionas algo muy importante. Es una película de relaciones familiares, sobre todo. Lo que motiva al Halcón es su familia. Lo que te motiva a ti como hijo del Halcón es la familia, lo que motiva a “La Colorada” es la familia. Vivimos en un mundo en el que pareciera que es un tema muy secundario y me agrada mucho que lo estén poniendo otra vez como algo principal, como regularmente ha sido con tu trabajo. ¿Qué tanto te mueve a ti agarrar este tipo de cintas?
Para mí es mi razón de hacer cine, te soy muy sincero. Concuerdo 100% contigo, siento que la familia mexicana es un tesoro. Siento que la familia mexicana se apoya. Hace poco fui a un concierto y me dio mucha risa que en el concierto había bebés, niños, abuelitas, mamás, tíos, familias. Estaba toda la familia reunida, así como si fueran 15 años o una boda, todos van al concierto, todos van al cine, todos van al restaurante, todos van a hacer esto. Y esta unión familiar es lo que mueve a los personajes y me parece entrañable. Me parece muy mexicano. Otras culturas no lo tienen, no lo tienen tan arraigado. La verdad que para México es un honor y un orgullo. Para mí son las historias más lindas, las historias de familias.
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