Entre el amor y la música: El primer Auditorio Nacional de Reyno
COBERTURA. Luego de 10 años de trayectoria la banda finalmente ofreció su primer concierto en el Auditorio Nacional, entre grandes invitados, reencuentros especiales y un público entregado
Concierto
La banda celebra 10 años de trayectoria.
"El amor de tu vida es el encuentro de dos almas que se reconocen mutuamente, es aquella persona con la que te sientes en sintonía y armonía, como si fueran dos piezas de un rompecabezas que encajan perfectamente, es aquel con quien te sientes en casa en cualquier parte del mundo y cuya ausencia deja un vacío eterno en tu corazón".
Personalmente creo que no hay música que relacione más con el amor y la idea del “amor de mi vida” que la de Reyno, quizá porque fue la compañía durante el duelo por la pérdida de la persona que inspiro las palabras anteriores.
Sin duda los conciertos los hace uno mismo, cada uno le da cierta carga emocional al ritual musical de escuchar a su artista favorito en vivo. En este caso, puedo afirmar que el concierto fue sumamente emocional, despertó sentimientos dolorosos y resulto en un evento catártico para sanar aquella herida que lleva varios años sin poder cerrar.
La noche del pasado viernes fue especial, para Christian Jean (y para mí), una de las mentes detrás de Reyno, el único miembro de la formación original nacida hace 10 años, pues se trataba de la primera vez que la banda pisaba el mítico escenario del Auditorio Nacional.
La baterista, productora musical, multi instrumentista chilena, Rubio fue la encargada de abrir la noche y más adelante también acompaño a Jean con una canción.
El Auditorio se apreciaba notablemente vacío, sin embargo, esto no impidió que Jean y compañía ofrecieran un concierto enérgico que inició con “Parte del sol” en una bella versión acústica, luego de un “buenas noches”, por parte del cantante, y el arribo del resto de la banda al escenario siguieron “Fugitivo”, “Dualidad” y “Fluye”.
“Yo te deseo lo mejor/Que todo salga bien/Y mucha suerte/La vida gira en espiral/Y todo fluye más/Sin esperarte”, reza "Fluye".
La relación entre el amor y la música es profunda y ha sido explorada a lo largo de la historia en la literatura, el arte y la cultura en general. Aunque es difícil dar una definición única, se puede decir que la música y el amor están intrincadamente relacionados de varias maneras.
Continuaron “Blanco y negro”, “Levedad” y “Nébula”, con una poderosa banda y un gran acompañamiento visual; siempre se agradece cuando el artista va más allá y se nota el detalle en la complicidad entre sonido, setlist, juego de luces y demás elementos visuales, en este caso una estructura de metal (con luz) en forma del clásico logo de Reyno, los tres triángulos entrelazados.
Reyno ofreció poderosa banda y un gran acompañamiento visual
“Nunca te amé”, “Remi” y “Repetición” (vaya canción, la letra es hermosa, profunda y dolorosa) dieron paso a “Viaje por lo eterno”, la colaboración con Florencia Quinteros, vocalista de la banda Celest y esposa de Christian. Florencia no fue la única invitada de la noche, también se presentaron Adán Jodorowsky y Manuel Coe (Camilo Séptimo), cuya participación se anunció en la conferencia previa al concierto.
Luego de “Control”, "No necesito más” y “Revivir” los músicos bajaron del escenario para dejar a Christian únicamente en la compañía de su guitarra acústica, para interpretar “Inseguro” (una nueva canción en su repertorio) el Auditorio se ilumino con las linternas de los celulares y al concluir la canción, Jean agradeció por el mágico momento.
La música tiene la capacidad única de evocar recuerdos y emociones asociadas con experiencias pasadas. Muchas personas asocian canciones específicas con momentos o relaciones de amor en sus vidas, lo que hace que la música sea un poderoso recordatorio de esos momentos especiales.
Continuando en modo acústico, el cantante regalo “Hasta el último día” (“No me arrepiento de nada de lo que te di/No me arrepiento de ser lo que fui junto a ti”), tema en el que el cariño le público sonrojaron al musico y “Fuerza ancestral”, dedicada a su padre presente desde el cielo.
El concierto contó con varios invitados especiales.
A punto del cierre sonó “Purifícame” en una versión completamente distinta, pero muy bien lograda y “Me desprendo”, dieron paso al pequeño descanso (encore) de los músicos, que tras unos minutos regresaron con “Formula” (Hay un retrato de tu esencia/Que sólo yo lo puedo ver/Una partícula/El complemento de mi ser) y “Química” (Me enamoraste con psicodelia y tu naturaleza/Es que a pesar de conocerte poco/Parece toda una vida/Y ya no encuentro la manera de vivir sin ti”).
Durante la conferencia de prensa previa al evento, Christian anuncio que tendría un invitado sorpresa, era momento de que subiera al escenario, con la voz entre cortada y muy conmovido, Jean presento a Sebastián Franco, el primer bajista de Reyno quien toco “Dos mundos”, “Amarrado” y “Nunca me dejes”.
El final de la noche llegó, entre agradecimientos al público por ayudarlo a “cumplir su sueño” de tocar en el auditorio nacional, Christian despidió la velada con “Ay de ti” ("Déjame enterrarte aquí/Muy adentro de mi subconsciente/Eternamente/Para que olvidar lo que fuiste conmigo”) y “Solución”.
La música también puede también fortalecer y enriquecer las relaciones amorosas. Las parejas a menudo comparten canciones que les son significativas y que simbolizan su amor. La música inspira y motiva a las personas en sus relaciones amorosas. Funge como una fuente de consuelo, aliento o empoderamiento cuando se trata de cuestiones de amor o pérdida del mismo.
Reyno ofreció una selección musical de más de 25 canciones.
Para Trainer: Te dedico cada palabra de este texto, te dedico cada nota de cada canción que sonó durante el concierto, te dedico cada suspiro y cada luna, gracias por enseñarme el verdadero significado del amor y a ofrecerlo desde y para el alma. Te amo, siempre.
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