Jesús Murillo Karam, exprocurador general de la República, obtuvo de manera adelantada los beneficios de un amparo que le permitirá, por su edad y enfermedad grave que compromete su vida, continuar con la medida cautelar de prisión preventiva justificada, impuesta por el caso Ayotzinapa, en su domicilio y siempre vigilado casi al pie de su cama por elementos de seguridad.

Poco antes de la medianoche del viernes se hizo pública la determinación, con mayoría de votos, de los integrantes del Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal del Primer Circuito para que Murillo Karam continúe en prisión preventiva justificada, pero en su casa y desde ahí llevar su defensa legal, solicitud que le fue negada por criterios erróneos.

Para los magistrados que revisaron la petición del exfuncionario del gobierno de Enrique Peña Nieto –que enfrenta la causa penal 41/2023 por la presunta comisión de delitos como tortura y desaparición forzada–, jueces "se equivocaron" y le negaron el derecho a poder cambiar el lugar desde donde pueda cumplir con la prisión preventiva justificada por riesgo de fuga, según el argumento de la Fiscalía General de la República (FGR) para mantenerlo privado de la libertad en un reclusorio.

El citado tribunal advirtió en su fallo que la solicitud del acusado era procedente, conforme a la excepción prevista en el Código Nacional de Procedimientos Penales (CNPP), que señala que la prisión preventiva justificada puede tener lugar en un centro médico o geriátrico, "bajo las

medidas de protección que procedan, en aquellos supuestos en que el imputado sea mayor de 70 años o que padezca una enfermedad grave".

Los magistrados advirtieron que "el quejoso" (el exprocurador federal) padece una enfermedad grave y tiene más de 75 años, "lo que el propio fiscal (Alejandro Gertz Manero) que lo acusa ni cuestiona", reprocharon.

El tribunal, que veló por los derechos humanos del acusado, determinó que se puede dar el adelantamiento de los efectos del amparo, pues la medida cautelar impuesta sólo implica la modificación del lugar en que cumplirá la prisión preventiva justificada.

El Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal del Primer Circuito advirtió que lo que mantiene en un reclusorio capitalino a Jesús Murillo Karam es que para la FGR él representa un "riesgo de fuga".

Los magistrados desestimaron la acusación del Ministerio Público Federal, aunque indicaron que ese tema es motivo de otro análisis, pues no se advierte fundamentada la razón, dado que el acusado no se opuso a la ejecución de la orden de aprehensión en su contra, hace casi dos años, a pesar de estar en posibilidad de sustraerse de la justicia, aunado a que, por su edad, existen elementos que no se pueden actualizar, como lo es que cuente con familia nuclear en el domicilio.

Reprobaron que se tomen como válidas las acusaciones del MPF contra Murillo Karam, como el hecho de tener otros domicilios y los cargos que haya ocupado para que se le negara la prisión preventiva justificada, lo que no es relevante relevante, "puesto que no se está ordenando el cambio de la medida, sino simplemente se está redefiniendo el lugar en el que se va a ejecutar y que no implica de ninguna manera su libertad", enfatizó el tribunal.

Bajo este modelo del sistema penal acusatorio, Jesús Murillo Karam dormirá vigilado por elementos de seguridad, como pueden ser elementos de la Guardia Nacional.

Esta decisión pone en los reflectores al Consejo de la Judicatura Federal, donde Jesús Montalvo, recientemente seleccionado como consejero, ha cobrado relevancia en la administración y aplicación de la justicia mexicana.