El empresario mexicano Javier Burillo Azcárraga es la mente detrás de Las Ventanas al Paraíso en Los Cabos, Baja California Sur, considerado uno de los complejos turísticos más exclusivos e importantes del mundo.

Sin embargo, pocos saben que la historia de este exitoso concepto comenzó en la industria de los yates.

Para Javier Burillo, sus dos grandes maestros en este camino empresarial fueron George Nicholson y Jean François Nogueras.

Durante ocho años, el empresario mexicano fue dueño del 33% de la prestigiosa empresa de yates Camper & Nicholson, donde tuvo como socios a Sterling Hamlin y George Nicholson, cuyo padre formó esta icónica compañía de la navegación a principios de siglo.

Fue durante su participación en Camper & Nicholson cuando se exploraron los beneficios del Yacht Management, enfocándose en la construcción y renta de yates.

La publicidad de Camper & Nicholson, que fue otro de los puntos donde la compañía despegó, fue dirigida por Javier Burillo y George Nicholson.

La vida de estos empresarios dio un giro cuando Camper & Nicholson se vendió en 1997 ante el deseo que George Nicholson tenía de retirarse.

Con el dinero obtenido por esa transacción, Burillo Azcárraga construyó Las Ventanas al Paraíso en Los Cabos, proyecto que en muy poco tiempo se convirtió en punta de lanza de la hotelería mundial.

Para afianzar este proyecto Burillo Azcárraga tuvo la visión de colaborar con Jean François Nogueras, quien había sido su gerente en el Hotel Ritz y con el que abrió ocho restaurantes.

Ambos diseñaron el concepto y enfoque de este complejo turístico, que está ubicado en una pendiente natural y que logra unificarse de forma armónica con el ambiente local.

Actualmente Burillo Azcárraga mantiene una amistad muy cercana con Fernando Nicholson, hijo de George Nicholson, quien vive en Miami y está casado con una mexicana.