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El día llegó y este lunes padres y madres de familia acudieron puntuales a la cita, antes de las 8:00 de la mañana, medio centenar de personas ya estaban a las afueras de la escuela primaria “Amalia González Caballero”, pero de los 440 estudiantes, no se presentó ninguno.
El cierre simbólico del plantel se llevó a cabo como lo habían anunciado la víspera, aunque no duró mucho tiempo. Alrededor de las 7:30 de la mañana acudió al plantel, Héctor Bernabé Negrete, director operativo de la subdirección de Educación Primaria número 2, quien de manera muy precisa se comprometió a comenzar a atender las demandas de los paterfamilias:
Restablecimiento al 100 por ciento del servicio de energía eléctrica para toda la escuela, -ya que este lunes sólo una parte del plantel, que contempla tres edificios de salones tenían luz-, limpieza de cisterna y tinacos para que se pueda contar con agua limpia, además, de tener la posibilidad de contar con clases virtuales para quienes decidan que todavía no es el momento de enviar a sus hijos a la escuela.
El funcionario precisó: “Yo les quiero recordar que todos estamos en riesgo, ustedes, quienes tienen que ir a trabajar, nosotros sus servidores, los maestros, pero todos tenemos la obligación de ayudarles, de sumarnos con ustedes y es lo que vamos a hacer”, fue el compromiso, de quien aseguró “mi oficina está abierta para ustedes, siempre y cuando sea para atender asuntos de mis niños, es decir, para sus hijos, porque los maestros para eso estamos para formar buenos ciudadanos”.
Bernabé Negrete, quien estuvo acompañado de Abigail Carreón Velázquez, supervisora de la zona escolar número 101, ingresó al plantel para constatar las condiciones en el plantel que hacía imposible las clases presenciales, motivo por el cual los padres de familia de los 440 estudiantes se negaron a que asistieran este lunes, aunque autoridades del plantel habían informado que el 30 por ciento del alumnado se presentarían, divididos en dos días, una mitad lunes y martes y la otra mitad miércoles y jueves y alternados, un viernes la primera mitad, y al siguiente la otra mitad.
Debido a que algunos padres de familia tendrán la necesidad de mandar a sus hijos a la escuela, debido a que trabajan o no tienen quién les cuide a los pequeños, Bernabé Negrete pidió que se respete el libre derecho de esas familias, al tiempo que aclaró que las video clases podrán ser posibles desde las aulas de la escuela, siempre y cuando se acomoden las cámaras de tal manera “que sólo aparezca el maestro titular y no el resto de los estudiantes”, posibilidad a la que se había negado rotundamente la directora del plantel.
Una vez, que ingresaron al plantel, el funcionario y su comitiva, así como directivos de la escuela primaria y una comisión de padres de familia, comenzaron a redactar la minuta de los acuerdos y compromisos alcanzados, lo cual permitió el ingreso de alrededor de 15 estudiantes, la mitad de ellos, por su estatura, uniformes y mochilas nuevas, fue fácil identificar que eran de primer ingreso. La promesa fue que en una semana, Bernabé Negrete, regresa al plantel para constatar los avances que se vayan registrando, aunque esta misma tarde, una cuadrilla de trabajadores de la alcaldía Azcapotzalco, comenzaron labores en la primaria.
La petición fue que a todos los estudiantes que vayan a ir a clases, los manden con su kit de limpieza personal, “ya que hubo dos niños que no llevaban ningún producto de higiene personal”, aunque el tiempo para que se normalice la jornada de trabajo normal, tardará algún tiempo, sin que hasta este momento ningún padre de familia sepa cuándo ocurrirá ello. La última instrucción del domingo, fue que a partir de este día los estudiantes tendrían que llevar doble refrigerio porque el horario de salida sería a las 16 horas, sin embargo, las clases concluyeron a las 12 horas, y una pequeña de sexto año, siendo la única de su salón que se presentó a clases, confesó, que “me la pasé platicando con el maestro, un largo rato, porque no había otra cosa qué hacer, entonces me estuvo preguntando que cómo me sentí durante todo el encierro. Fue lo único que hice”.
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