Todo lo que empieza, tiene que acabar. Es ley de vida. Y por mucho que no deseáramos terminara AXE Ceremonia 2024, así tenía que ser. El domingo, segundo día, nos tendría todavía mejores sensaciones que en su apertura.

Desde redes sociales mucha gente se manifestaba en publicaciones del festival vendiendo su boleto para la segunda parte de esta edición. “Estoy sumamente cansado por ayer. Vendo mi boleto súper barato”, se leían en las publicaciones al festival. Y cómo ese varios ejemplos en los que la gente no soportó o de plano no quiso ya acudir al domingo y descansar sus cuerpos.

Llegando al Parque Bicentenario la respuesta fue muy evidente al notar que básicamente no había nada de tráfico a las afueras y que el flujo de gente fue muchísimo más tranquilo al del día encabezado por Kendrick Lamar. El efecto del rapero originario de Compton se notó y mucho.

Aún con esto, o más bien, gracias a esto (en parte), nuestra estadía en AXE Ceremonia fue mucho más armoniosa y ligera, con el plus de que pudimos escuchar música mejor variada y con mejores actos en vivo, como el de Sevdaliza en el escenario principal y su performance corporal y vocal. Acompañada de dos músicos más,la cantautora iraní sorprendió a propios y extraños con sus canciones que fueron del hyper-pop, el techno, el reggaetón y el acid house, dejando muy buen sabor de boca para James Blake ahí mismo en el escenario principal.

Básicamente en el escenario AXE Ceremonia estaba pasando lo mejor. Y es que sin demeritar a Kenia Os en el empalme con el músico inglés, de verdad que fue demoledor con su sonido y magia al tocar. James Blake lucía muy feliz y se dio tiempo de interactuar con el público.

También mencionó que le daba mucha felicidad el ver que la gente apreciaba la música electrónica real tocada con instrumentos y no con laptops de la manera más sencilla. Esto después de tocar “Voyeaur” y hacer de aquel escenario una auténtica discoteca donde todos bailamos.

Jurando “somos el mejor público en el mundo”, esas mismas palabras de James Blake fueron mencionadas por James Murphy, vocalista y líder de LCD Soundsystem. No nos movimos del escenario AXE Ceremonia, y de hecho nos acercamos más para poder presenciar el verdadero sound system que los músicos originarios de Nueva York traían consigo.

Debajo de su característica bola disco, LCD Soundsystem demolió el cuerpo y emociones canción a canción dentro de su set que incluyó mucha música dance que se transformaba también en la mejor canción de rock con demasiado riff de guitarra y una batería dominante.

Uno de los headliner del cierre del festival, vaya que nos llevó a la luna con aquella selección de temas, algunos conectados entre sí mismos. Al terminar Arca ya estaba haciendo lo suyo en el American Eagle, la carpa que sinceramente le quedó muy pequeña para toda la gente que apreció su show. Un rato de solo escuchar algunas de sus canciones (ya que era imposible verla), se optó por la opción de ver el acto de Four Tet nuevamente en el escenario principal. ¡Y qué fiesta! 

Kieran Hebden, mejor conocido como Four Tet, nos hizo entrar en trance con su selección musical donde también funcionó para presentar su más reciente álbum Three, estrenado hace apenas una semana. Acid house y techno resplandecieron los cuerpos agotados de los asistente, dando vida por unos minutos más. Hasta que tenía que terminar.

Ya entrada la madrugada y con el frío aire combinándose con las partículas de arena en el ambiente, tocó turno de despedir una edición más del AXE Ceremonia, que incluyó momentos increíbles y por supuesto memorables para todos sus asistentes en esta jornada doble dentro del Parque Bicentenario.

Ya veremos qué sorpresas nos tiene este festival, ya de tradición, para un todavía incierto 2025. 

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